Cómo probar por detrás sin mucho trauma
Fecha: 06/07/2022,
Categorías:
Bisexuales
Autor: Recomendador, Fuente: CuentoRelatos
... Eso confirmó que no pensaba utilizar condón y me alegró que no hubiéramos tocado antes ese tema.
Se acercó para besarme y yo le dije que no, que nada de besos ni caricias, que no me gustaba. Se ralló un poco en plan no sé qué hacer y empezó a hablar. No le respondí y le bajé los pantalones y calzoncillos. El tamaño no era muy grande, bastante gorda, pero estándar. Me puse bastante nervioso porque aunque no fuera muy grande, sabía que no iba a caber, y si cabía, iba a doler.
6 Tranquilízate.
En ese momento estuve a punto de anular, pero me dije a mí mismo que no pasaba nada, que ya que había empezado... Así que estuve un buen rato chupándosela para que me diera tiempo a relajarme. Al cabo de un rato, el hombre me dijo que me la quería meter. Me puse a cuatro patas y empezó a intentar meterla (con mucho lubricante). Poco a poco, me pareció una eternidad, por fin entró la punta. Suele, y es buen momento para que pare un poco y tú te relajes. Cuando estuve listo volvió a empujar. Cada centímetro que entra, te da sensación de que es media polla. Al cabo de un buen rato y más lubricante, ya entraba y salía más o menos bien. Después de otro buen rato, el tío ya estaba dando puntazos y follándome casi a placer (cuando me la metía entera todavía dolía demasiado). Yo luchaba por relajarme e intentar disfrutar a pesar del dolor.
Llegó un momento en el que por fin me estaba follando bien y como quería. Para entonces yo tenía los brazos cansados de estar a cuatro patas y ...
... puse la cabeza y los hombros en la cama (lo cual hace que el culo esté más en pompa. Parece que eso le gustó porque empezó a dar empujones, me cogió de las caderas, me apretó fuerte y se corrió todo lo dentro y fuerte que pudo. Es curioso como no noté el semen entrando (yo creía que se notaba), sólo tres o cuatro pulsaciones de la polla echándomelo.
7. El post polvo es incómodo.
Y ahí estás tú. A cuatro patas y con la polla de un tío que se acaba de correr en tu culo. Al terminar, él empezó a decir lo que le había gustado y demás pero le dije que no hacía falta. Me la sacó, se limpió, se vistió y se fue.
Yo me quedé echado boca abajo un rato digiriendo la situación y fui a lavarme. Ahí es cuando notas el semen. Te sientas y cuando crees que no te queda más, a los diez minutos te vuelve a chorrear.
8. Repite y experimenta.
Después de año y medio quedan pocas cosas que probar. Hay que dar con lo que os mole a los dos.
Se me ha corrido en todos lados y a mí me gusta dentro, lo que más. Dentro de la boca me gusta, en la cara no me importa. En los cachetes también me gusta. En cambio, no me gusta que me salpique la espalda ni el pecho.
En cuanto a posturas, el misionero no me gusta, hay que abrir mucho las piernas y me resulta incómodo. De lado no me importa, tumbado boca abajo está bien y yo montado encima con el mirándome el culo, lo utilizo cuando quiero controlar y tener la polla más rato y más tranquilo. La que más utilizamos es a cuatro patas, con los ...