Sucedió en Lisboa
Fecha: 09/07/2022,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... supuse que estarían dormidos y me volví al salon a intentar descansar.
Cuando no llevaba ni 5 min, se escuchó un leve gemidito, por lo que afine el oido. Luego un bufido claro de Guillerme acompañado de un -“joder, que bien la chupas” . Luego silencio y al rato otra vez gemidos de Rebeca -“mmmm, dios que bien, sigue, si, si, ahi, sigue joder”
Y esos gemidos eran cada vez eran mas fuertes y esos gemidos fuertes se convirtieron en gritos -“ahhhhh, ahhhh, ahhhhh, dale cielo, mas fuerte!!! Mas fuerte joder!!! Buffffff, ahhhhh, ahhhhh, hasta el fooondooo, por favor, siiiiii, me corro otra vez joooooder, ahhhhhhh”
Y allí estaba yo, en el sofa de un apartamento de Lisboa, escuchando como mi novia, la que no quiso follar la noche anterior porque la daba vergüenza que la oyesen, se corría como una cerda pegando unos gritos que se escuchaban desde Oporto
La noche fue larga no, larguísima. Intentaba dormir en el sofa pero siempre que estaba a punto de cerrar los ojos una nueva sesión de gemidos me despertaba. Perdí la cuenta de lo polvos que echaron esa noche, pero vamos, no menos de 5 o 6. Solo deseaba que se cansasen y se durmieran para intentar dormir algo.
Por fin, cerca de las 6am, se dejaron de escuchar gemidos y conseguí conciliar el sueño.
A las 9 de la mañana me desperté. Estaba hecho un auténtico despojo y necesitaba urgentemente una ducha.
Como no se oía nada entendí que seguían dormidos y mas después de la maratón de sexo que habían tenido por la noche, ...
... así que me dirigí en silencio al cuarto para no despertarlos.
Abri la puerta poco a poco mirando al suelo y lo primero que recibi fue una bocanada de aire caliente acompañado de un olor a sexo y sudor casi irrespirable. No os exagero si os digo que allí la temperatura podia ser de mas de 40 grados
Cuando levante la cabeza allí los vi, mi novia a 4 patas, mirando hacia la puerta pero con los ojos cerrados, la boca totalmente abierta y en silencio. Totalmente sudada, el pelo pegado a la cara. Y detrás el, sonriente, con las 2 manos en la cintura, dándola desde atrás lentamente haciendo que mi novia se moviera adelante y atrás, campaneando sus tetas que al ir y venir golpeaban el collar de flores que colgaba del cuello de mi novia. La escena era brutalmente erotica.
-“Buenos dias Fran” dijo Guillerme -“has dormido algo? Nosotros poco, aquí tu novia no quería parar”
Eso hizo reaccionar a Rebeca que abrió los ojos de repente y al verme intento taparse las tetas con una mano dejando la otra apoyada en la cama. -“vete por favor, Fran, no debes ver esto”
-“Dejale que nos mire, mujer, ya veras como disfruta” añadió Guillerme sin dejar de percutir lentamente
Y allí me quedé, como un pasmarote en la puerta observando el espectáculo.
Mi novia se resignó y se dedicó únicamente a disfrutar de la follada que estaba recibiendo.
Durante un momento presté atención al cuarto: marcas de sudor en el suelo y las paredes, marcas de manos en el espejo, ropa y condones usados ...