El chico de la banda
Fecha: 16/07/2022,
Categorías:
Hetero
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
La universidad había terminado, por lo menos el último semestre de ese año estaba culminado, se había alejado con todo el estrés, las noches en vela y el odio de posponer el estudio que sabía que debía haber hecho muchos días atrás, pero hoy para cerrar ese ciclo y olvidarse de que estudiaba iría a su pub Rock predilecto.
Se pondría su vestido favorito, la parte superior era similar a la lencería y el resto de tela se movía libremente, vestido que marcaba sus curvas, pues intuía que hoy era el día para hacerlo, para mostrarlas y ser observada, pero no era magia del vestido era ella la que arrancaba miradas, era una joven de tez morena, cabello y ojos color azabache que hipnotizaban, sus curvas más pronunciadas eran sus piernas y nalga.
Esa noche estaban en el Pub de siempre, preparados para tocar las canciones de siempre, aunque tendrían más público del acostumbrado.
Ella llegó, se acercó a una de las mesas después de pedir dos cócteles, había seleccionado un lugar que daba de lado al escenario y perfectamente le podían ver las grandes piernas, se sentía coqueta, provocadora, no llevaba bra y tenía unas bragas muy pequeñas,
-Esta noche me acuesto con él- pensó y le bajaba un calor por su vientre hasta llegar a su sexo.
La banda seguía con su rutina y ella más que disfrutar de su música, disfrutaba muchísimo con ver a uno de los integrantes; el joven estaba en el bajo o en la guitarra, era de estatura promedio, tez blanca, esbelto, de ojos serenos, manos finas ...
... y ágiles. -Así como podía tocar ambos instrumentos, maravillosamente podría tocarme el cuerpo también- pensó con picardía.
Tocaba esa noche el bajo, desde que pisó el escenario se había fijado en la chica de ojos negros como el azabache y sentía que sus ojos le hablaban, tocaba el bajo con tal pericia imaginándose que era ella a quien tocaba y no a su instrumento, los ojos le empezaron a bailar por todo su cuerpo, se detenían intencionalmente en algún lugar y ahí los clavaba hasta la siguiente canción. Al cabo de un rato la música acabo, el juego de fijarle la mirada mientras bebía alcohol la estaba empezando a llenar de calor en su sexo más de lo que debería, salió del Pub porque sentía que emanaba la necesidad de sexo por sus poros.
Al verla en la puerta sintió inquietud dejo el bajo y salió tras ella.
Ella afuera empezó a respirar hondo, calmando su necesidad, tratando de reponer sus 5 sentidos.
-Espero que no tengas planes esta noche- La miro de arriba a abajo y se detuvo en sus piernas.
Ella sintió que se le detuvo el corazón al escuchar su voz, pero en ese momento no tenía absolutamente nada que perder y le dijo -No los tengo, aunque puedo inducir cuales son los tuyos y creo que esos me incluyen- le guiñó el ojo al decirlo.
-Estas en lo cierto- Él se acercó -Quisiera tocar tu cuerpo mucho mejor de lo que toco a mi bajo- Puso su mano en la espalda de la chica hasta bajar a su cintura, a ella le temblaban las piernas, pero era tanto su fogosidad que le ...