Un hijo ayuda a su madre, todo lo hace por amor
Fecha: 21/07/2022,
Categorías:
Incesto
Autor: Aldebaran, Fuente: CuentoRelatos
... Hazlo despacio.
Su hijo le introdujo el glande, pero ella se estremeció. No le entraba más.
Su padre se levantó y le animó. Acarició los pechos de su mujer y tocó sus pezones. Ella estaba excitada, pero no lo suficiente.
-Ahora hijo empuja un poco más. Más fuerte. Métesela toda.
-Aaah, me duele.
-Tranquila cariño, le dijo el marido. Tú empuja más.
Su hijo miró a su madre preocupado y esta asintió.
Empujó más fuerte y no solo entró el glande entero, sino casi todo el pene.
Su madre sudaba. Su padre le limpiaba el sudor.
-Sigue hijo, sigue. La pomada debe untarse por dentro.
El hijo obedeció. Nunca lo había hecho pero el instinto es el instinto y enseguida estaba entrando y saliendo.
Ahora el chico estaba disfrutando un montón, estaba a punto de correrse pero no se atrevía a decirlo. Su respiración era agitada. A su madre se le caían unas lágrimas mientras su hijo se la follaba. Le dolía, pero tenía que aguantar.
-Mamá, que gusto me da, ah, ah, ah, ah. Eres tan guapa, eres tan guapa, ¿te gusta cómo te lo hace tu hijo?
-Sí, tesoro, le dijo ella llorando. Estaba feliz aunque le doliera.
Su padre asentía y estaba excitado también aunque no se empalmase.
Al poco estaba al borde del orgasmo.
-Papá, me viene, ya llego, me corro, ¿qué hago?
-Córrete hijo, córrete dentro. Tu madre lo necesita.
Siguió un poco más y finalmente se derramó dentro de ella.
-¡Aaaah! ¡Qué gusto! ¡Me corrooo!
Dio unos empujones más hasta que terminó ...
... de soltarlo todo.
Ya calmado después del orgasmo, se quedó dentro de su madre un momento.
Su padre le ayudó a incorporarse después de sacarla y ayudó también a su mujer a levantarse.
-No he llegado al orgasmo, pero ha estado muy bien. La próxima vez hijo, seguro que no me duele tanto y consigo correrme contigo.
El chico estaba muy contento. Había perdido la virginidad y había ayudado a su madre.
Pasaron unos días en que el chico seguía casi continuamente a su madre. La vio desnudarse, vestirse de nuevo. La miraba en la ducha, siempre con la complicidad de ella y su padre. Tenía que convertirse en un amante para ella.
Después de una semana decidieron que tendrían el segundo encuentro.
Su padre le animó. Le dijo cómo excitar a una mujer antes de la penetración. Cómo besarla, tocarla, hacerle de todo y finalmente, penetrarla.
Se desnudaron ambos en la habitación de sus padres. Su padre los miraba con pasión.
Besó a su madre con pasión como si fuera su novia. Agarró sus pechos con fuerza y lamió sus pezones. Luego bajó hasta su culo y lo sobó con fuerza. Tenía celulitis pero no le importaba para nada.
Ya excitada la tumbó en la cama y abrió sus piernas. Separó sus labios y comenzó a comerle el coño. Su padre le había dicho como le gustaba a su madre y él siguió sus indicaciones.
Cuando estuvo lo suficientemente húmeda, se puso encima de ella mientras su padre le pasaba la pomada a su madre y esta se la untaba.
Plenamente erecto la penetró con ...