1. Un paseo por el muelle, la solución a mi crisis de los 40.


    Fecha: 28/08/2022, Categorías: Voyerismo Autor: frida, Fuente: RelatosEróticos

    ... cerró esa puerta y ya andaba mi mujer desnuda completamente tan solo con las deportivas puestas y el marinero con su camiseta de tirantes azul obviamente también sucia y con su parte de abajo desnuda que dejaba ver en su entrepierna una polla aún todavía por despertar pero que prometía dotación pues aunque relajada se le notaba buena verga al tipo. Tenía a mi mujer sentada en una maroma de cuerdas para amarrar los barcos en su atraque y ella abierta de piernas se dejaba abrazar y besar el cuello de una manera muy erótica por parte del marinero al que poco a poco su polla iba despertando haciéndome ver que mi profecía de su tamaño era real y en breve alcanzó una dotación dos o tres dedos más que la mía, unos 21 o 22 ctms de carne con sabor a sal que mi esposa se iba a comer. Eso sí, antes él rindió buena fe del coño de mi mujer agachándose a saborearlo para tal efecto mientras ella estaba recostada en esa maroma de cuerdas apretando fuertemente la cabeza de Juanjo que así se llamaba ese marinero por lo que le escuché a ella y éste con autoridad levantaba la vista buscando una mirada cómplice de mi mujer y lo que veía a cambio era a la muy puta con la otra mano agarrándose una de sus enormes ubres y chupándose el pezón mientras gemía como loca. Yo iba a reventar y mi masturbada era algo normal conque me afané en darme placer viendo ese espectáculo sexual. Pasado largo tiempo haciendo las delicias de mi esposa, ella le pide un cambio de situación y algo que me dejo estupefacto, ...
    ... le pidió que se volteara y se pusiera Juanjo como si le fuera a dar por el culo….. ella se arrodilló y empezó a darle un beso negro en su ano mientras masturbaba su polla y lamia igualmente sus huevos.
    
    Eso me dejó helado pues si Juanjo decía que jamás se lo habían hecho, en 21 años que llevo con ella a mí tampoco me lo hizo. Ella reía y no decía nada, lo volteó y ya con su verga parada delante de su boca no tardó en devorarla con ansias y acompañaba la mamada con dulces gemidos que a mí me ponían a mil imagino como estaba Juanjo recibiendo esa comida de polla. Acto seguido Juanjo decide poner a mi mujer de a perrito y siempre apoyados en la maroma de cuerdas que fue testigo mudo de esa brutal follada que se iban a dar ambos, y con el redondo y enorme culo de mi esposa totalmente levantado, Juanjo le ensartó una clavada en seco que hizo ponerse de puntillas a mi mujer y desde el primer instante el ritmo fue bestial, el choque del cuerpo de Juanjo contra el culo de mi mujer hacia retumbar ese frio cuarto de aparejos de pesca entre los sollozos y gemidos de mi esposa…
    
    Escuchar eso fue una melodía morbosa para mis oídos y no aguante por mucho tiempo más y mis chorros de leche caían en una lata de aceite para barco vacía mientras seguía disfrutando de esa escena viendo el bamboleo de las tetas de mi mujer en cada dura embestida que recibía de Juanjo, que todo hay que decirlo, creía que podría tener más aguante pero creo que le pudo la situación y encontrarse con una follada ...