Fiesta swinger con strippers
Fecha: 12/06/2018,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... las guiaba a sus senos, ambas manos de la pareja tocaba cada uno de sus senos, acariciaba su redondez, les pedía que jueguen con sus pezones, les disponía que le estirasen con suavidad y poco a poco las juntaba, las dos manos junto con la suya eran luego una sola que seguían sus movimientos, se las llevó a la vagina y comenzó a metérselas en su hueco, se masturbaba con ellas, las metía, sacaba, manoseaba su intimidad, ¡las mojaba con su boca y se volvía a meter en su vagina! y de un momento a otro pidió al resto que estábamos que escojamos nuestras nuevas parejas y que hagamos lo mismo que ella, la música era el cómplice de este inicio de orgía, camuflaba perfectamente la infidelidad que todas las parejas asistentes al evento estábamos comenzando a hacer, todos manoseábamos al mismo tiempo a nuestras parejas y a la bailarina que permanecía en el centro del salón, ella nos tomaba de las manos y acompañaba el manoseo a la vagina y culo, pedía que se dejen tocar el clítoris y gemía junto con las homenajeadas de la excitación, nuestras mujeres se ofrecían a todos que las tomemos, quien quiera e incluso todos a la vez.
Nuestra bailarina invitada era toda una motivadora profesional, lo mejor de ella dejó para el final, se sacó los zapatos de tacón y untó en sus pies licor de menta, lo mismo colocó en sus pantorrillas, muslos, abdomen y canalillo entre los senos, se sentó sensualmente en un sillón de la sala de baile, abrió sus piernas lo más que podía dejando ver la carne ...
... rosada de su hermosa vulva, pidió a dos amigos que se sitúen uno a cada lado y saboreen el dulce licor de sus pies, ellos cual esclavos lo hicieron de dedo en dedo, acariciando suavemente el empeine y la planta, metiendo la punta de sus lenguas entre los dedos y nosotros los otros dos acariciando las bellas pantorrillas y muslos de esta diosa, besando su abdomen, lamiendo su piel, pero no más que eso, nos pedía reservarnos para nuestra fiesta privada, para nuestras invitadas.
Las mujeres entendieron el mensaje que serían ellas las homenajeadas y fueron en grupo a la habitación invitándonos a que las sigamos, nos llamaban y decían que nos estábamos perdiendo de algo rico, al minuto uno de mis amigos fue al llamado, yo lo seguí después de despedir a la bella dama; al entrar al salón ví de reojo que en la cama estaban ligeramente tapadas con el cobertor nuestras cuatro esposas frente al amigo moreno, en actitud de ofrecidas se mostraban en cuatro patas, enseñaban los senos, se abrían de piernas mientras él las contemplaba y ellas lo disfrutaban. Me entró una furia mezclada con celos y placer, podía reconocer los pies de mi esposa jugueteando bajo las piernas de mi amigo, se podía ver que las chicas estaban entre mezcladas todas sobre y abajo el cuerpo de él.
Me quedé a centímetros de la cama, de inmediato ví que las chicas se acomodaban pero mi esposa se puso frente a él, entre sus piernas, éste se mantenía recostado sobre la cabecera de la cama, se despojó del cobertor, se ...