Mariele trabajando duro - Relatos Eróticos

Mariele trabajando duro

... placentero el momento, por la cercanía podía oler su perfume que era bastante agradable muy suave...

Yo mañosamente no levantaba del todo las cajas para que le costará trabajo y pudiera seguir dándole pequeños arrimones obviamente no pude evitar excitarme ya le tenía muchas ganas y estar en esa posición me ponía aún más, mi miembro se empezó a erectar por la situación poniéndose muy duro y remarcándose en el pantalón, yo miraba para abajo mientras hacía el esfuerzo para poder ver tremendo culo contonearse frente a mí, de inmediato mi verga se puso como un mástil formando esa famosa carpa que se nos hace cuando el pene se levanta bajo la tela, justo en ese momento Mariele dio un tirón con fuerza sacando la caja y chocando de lleno contra mi y mi verga que se perdió de inmediato en ese par de nalgas.

¡Hayy! Dijo con sorpresa y algo de nervios dando un brinquito al frente al sentir mi dura erección. De inmediato se giró aún con la caja en manos dirigiendo la mirada a mi miembro.

Mar: wooo… ¡¿Y eso?!

La verdad es que me dio algo de vergüenza me sentía como un adolescente cuando le gusta su maestra…

-Perdón… es que… yo...

Mar: no te preocupes, pero me sorprendiste.

-De verdad lo siento, solo que ya sabes... ay cosas que uno no controla...

Mar: ¡y que cosas! -Dijo sin dejar de mirarme la verga.

-No imaginé que yo provocara jaja

-pues ya ves que si

Mar: pues yo pensé que te gustaban de tu edad, mira que una mujer de mi edad te provoque…

-Bueno es ...

... que... la verdad tienes un cuerpazo y te llevas de calle a muchas de mi edad.

Mar: ¡Ay ajaaa! Jaja

-Es en serio

Soltó la caja y se pegó a mi mirándome a directamente a los ojos

Mar: ¿de verdad te gustó?

-Bastante!

Mar: ¿Mmm y por qué no me lo habías dicho?

-Bueno, no quería ser impertinente además nos llevamos muy bien y pues tampoco se había dado el momento.

Mar: y este momento ¿es oportuno?

La tenía muy cerca, estaba muy excitado y mi mente dejo de pensar…

La tomé de los hombros y la bese apasionadamente, creí que se quitaría pero para mí sorpresa ella respondió de la misma manera, sentí como su lengua entraba en mi boca enredándose con la suya, baje mis manos a su cadera mientras la empujaba contra la pila de cajas que estaba tras de nosotros.

Acaricié su cadera rozando sus muslos mientras ella se abrazaba a mi cuello estuvimos así un par de minutos como si ambos quisiéramos probarnos el uno al otro.

Luego nos separamos mirándonos y sonriendo...

Mar: La verdad es que también me atraes, pensé que no captarías mis indirectas dijo sonriendo maliciosa.

Entonces entendí que todas esas veces no habían sido casual…

Volví a besarla, bajando a su cuello recorriéndolo con la lengua y besándolo de igual manera

-como no me vas a gustar Mariele, con este culote que tienes.

Le apreté las nalgas tan fuerte como pude

Mar: ¿Te gusta?

-Sii me encanta

Mar: hoy puedes hacer lo que quieras con el...

Volví a besarla mordiéndole los ...