La chica del pueblo
Fecha: 10/01/2023,
Categorías:
Hetero
Autor: AlazarRP, Fuente: CuentoRelatos
En ocasiones, empezar de cero es el inicio de empezar a intimar con el mundo que nos rodea.
Mi nombre es Nicolás, y para la fecha que estoy redactando este relato yo ya estoy bastante viejo; mi vida después de los 20 años había sido bastante aburrida, pues al ver que yo no tenía gran potencial para estudiar y convertirme en un ingeniero, mis padres decidieron que lo mejor para mí era regresar a nuestra comunidad rural, es decir al campo.
Lugar donde practicaría la agricultura el resto de mi vida y no es algo que me desagrade pues lo hice toda mi infancia; quiero decir tiene sus ventajas, es un trabajo duro sin embargo tiene unas ventajas económicas y para mi gusto físicas que no son tan complicadas de describir: vivimos una vida sin presiones económicas grandes y todo nuestro trabajo nos recompensa bien, la mayoría de los muchachos estamos generalmente muy grandes, comemos bien, tenemos una espalda ancha de estar acostumbrados a trabajos pesados, estar parados durante horas hace nuestras piernas agarrar un contorno y una fuerza sobrehumana, de vez en cuando, tenemos que empujar cosas o dedicarnos al campo a arar la tierra y esto nos deja unos antebrazos bastante llenos, unas manos toscas llenas de callos pero también unos buenos hombros donde poder recargar tu mano, así como yo no me puedo quejar de mis bíceps qué acostumbrados a las peleas entre colegas estaban bastante bien para poder impresionar.
Ha eso ya diré que mi aspecto físico constaba de una piel algo ...
... tostada de un color entre güero y rojizo debido a que mi mamá es de origen extranjero, un corte de pelo bastante modesto, mi cabello es color negro así como mi barba la cual he estado cuidando durante meses.
Llegar de nuevo al rancho, aceptando mi fracaso en los estudios no fue tan complicado pues me recibieron mis amigos y prontamente comencé a salir con mujeres, el único problema es que generalmente cuando empiezas a hacer una vida, las cosas se tornan bastante obligatorias, pasa poco tiempo antes de que embarazas a alguien, antes de que te cases, y vivas toda la vida esclavizado a tu familia, así se me enseñó que tenía que ser.
Por poco mi destino iba a ser ese, sin embargo lejos de la comunidad aprendí que había mundo detrás, y que mi juventud podría terminar en algo más que sólo eso.
No me malinterpreten, también tuve mis momentos de juventud, también caí en recoger una muchacha de piel suave, vestido blanco, sonrisa alegre y blanca, contorno de piernas fuertes, una silueta que hace contorno a el glúteo que es un sabroso círculo sostenido por caderas firmes, senos que denotaban femineidad chicos o tamaño mediano según se considere, y sobre todo una muchacha de miradas incitantes, recogerla de la casa de su padre, llevarla a dar un paseo, invitarla a una fiesta, para terminar perdidos en medio de algún cerro, muertos de calentura, sin condones o protección alguna, apoyados en algún árbol después de un rato de besarnos, el cuerpo de ella abrazando un árbol mientras el ...