Mis amigas tramposas: Liz y su esposo en silla de ruedas
Fecha: 26/03/2023,
Categorías:
Infidelidad
Autor: sandra garcia, Fuente: CuentoRelatos
Me llamo Liz, estoy casada con un hombre maravilloso que me ha invitado por mi cumpleaños a una peña, que es un tipo de discoteca para gente de 30 para arriba donde puedes bailar salsa, cumbia y bailes folklóricos.
Pero la cosa no es tan sencilla, actualmente tengo 38 años y mi esposo 60, cuando nos casamos yo tenía 22 y el 44, él era un hombre atlético y la verdad me hacía feliz pues es súper responsable, trabajador y les cuento que en el sexo era un tigre que me dejaba totalmente satisfecha, todo esto fue hasta hace un año en que tuvo un derrame cerebral, que le dejo paralizado la mitad izquierda del cuerpo, con mucha rehabilitación podía caminara despacio, pero el cuándo salía prefería su silla de ruedas.
Demás está decirles que en este año ha envejecido 20 años su pelo se ha encanecido, lo que más le ha afectado es la depresión, tuvo que dejar su trabajo, por lo que cuando me dijo para ir a la peña no quise contradecirlo, me dijo que también había invitado a mi hermano y a su esposa. Quise arreglarme para él y me puse un vestido que le gustaba mucho era uno rojo vueludo, que tiene un gran escote adelante y atrás, antes que se enfermara nos gustaba ir a las peñas, para bailar, tomar y siempre terminábamos en la cama con un sexo salvaje, demás esta decir que ahora con su enfermedad solo tenemos algo que se puede llamar sexo cada tres meses y eso. Soy bajita mido 1.60 m pero la verdad es que tengo bastante de adelante y atrás, sino que lo digan mis compañeros de ...
... trabajo y hasta mi jefe que me fastidian siempre y los bandidos no pierden la oportunidad para invitarme a salir, demás esta decir que siempre lo tome a la broma y me reía con ellos. Bueno termine de maquillarme, peinarme mi pelo negro lacio y ponerme un par de zapatos con taco 10 para lucir un poco más alta.
Mi hermano nos recogió en su carro, llegamos a la peña a eso de las 11 pm, teníamos una mesa reservada y mi esposo pidió una botella de wiskey con una cuba de hielo, yo invito que esta noche quiero que todos tomemos bien por el cumpleaños de Liz, lleno las copas y brindando dijo que por ser el primer brindis debíamos tomarlo hasta secar el vaso, todos lo hicimos. El no debía tomar pero no quise contradecirlo, más aun viéndolo tan animado.
Las horas pasaron rápido pues nos divertíamos con las ocurrencias de mi esposo y mi hermano se turnaba para bailar con su esposo y conmigo, yo que era muy bailarina me divertía, solo me daba pena que mi esposo solo miraba y como se quedaba en la mesa tomaba bastante, y así todos nosotros, a eso de las 2 de la mañana ya estábamos mareaditos, en eso mi esposo le pidió a mi hermano que lo acompañara al baño, él lo ayudo empujando la silla de ruedas, cuando me quede sola con mi cuñada, ella levanto su vaso y me dice:
- sabes brindo por ti que eres una sacrificada con un esposo invalido, como haces con el sexo, porque no creo que él te pueda hacer nada, a si tu hermano se quedara así, yo hace rato que le hubiera sacado los cuernos, yo no ...