1. El inicio de Pedro


    Fecha: 23/06/2018, Categorías: Confesiones Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Regrese dos meses antes por una tontería administrativa, mi permiso de seis meses debía renovarse por dos meses mas y resulto que tenia hacer el tramite personalmente. Mi primera intención fue contarle a mi esposa que estaría dos o tres días en casa pero no logre contactarme con ella pues el teléfono del pequeño aeropuerto estaba en mantenimiento y en aquellas lejanías no había cobertura de celular. Luego de seis horas de agitado vuelo en un bimotor tan viejo que si me hubieran dicho que sirvió en la segunda guerra lo hubiera creído sin titubear.
    
    Del aeropuerto al trabajo sin mediar ducha o desayuno, me reuní con mi jefe, conversamos sobre los avances del proyecto y me felicito por mi trabajo. Me firma la solicitud y me ofrece que me tome una semana, el es un buen samaritano, se preocupa por todos y sutilmente me señala los inconvenientes domésticos que puede traer en estos días tanta lejanía del lecho conyugal. Nos reímos y acepte de buen grado su oferta.
    
    Pasado ya el medio día llegue a mi casa, mi mujer no estaba como era de esperarse por su trabajo. En cambio me encontré con la señora Esperanza que solía ir un par de veces por semana a atender los asuntos domésticos. Cuando la salude pego un brinco y se persigno varias veces veces.
    
    - Por dios santísimo y la virgen ¿que hace usted aquí?- Me interrogo con la expresión de quien veía un fantasma.
    
    - Vine por un asunto del trabajo.- conteste tranquilamente, entonces ella se apresuro a decirme:
    
    -La señora no ...
    ... esta, anda en el trabajo.
    
    -Lo se, ella no sabe que estoy aquí.- Agregue, pero de inmediato Esperanza lanza un sentido
    
    -¡¡Ay dios mio!!
    
    Por supuesto a mi no me sorprendió para nada, seis meses a mas de tres mil kilómetros de distancia y sabiendo de sobra lo caliente que era, no me sorprendió en lo mas mínimo.
    
    -Me voy a duchar- le dije calmadamente.- Como yo me entere que usted ha llamado a mi esposa para decirle que estoy aquí, me voy a sentir muy decepcionado, usted ha servido a mi familia desde antes que yo naciera y quiero que eso continué, así que le pido que guarde silencio.
    
    -Pero es que...
    
    -Esperanza, ¿Ha comprendido lo que le he dicho?
    
    - Si señor, no se preocupe, no diré nada.
    
    Mi espera de los acontecimientos estuvo acompañada de una excelente ensalada cesar, un lomito cordon blue con salsa de trufas y verduras salteadas, y un delicioso cognac francés. Tenia curiosidad, tenia morbo, tenia ganas de saber con un grado de certeza inapelable que ella estaba gozando con otra persona.
    
    Me senté en una banca de la plazoleta que esta al frente del edificio donde vivimos Encendí un cigarrillo y me dispuse a esperar.
    
    La vi llegar en su auto. La acompañaban dos hombres. ¿Dos Hombres? esto si era sorpresa para mi, las veces que yo había propuesto un trío había recibido como respuesta un no tranquilo pero contundente. Entraron al estacionamiento subterráneo y la reja se cerro tras ellos. Encendí otro cigarrillo, algo no estaba bien aquí. ¿Por que mi mujer ...
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