Anal a la rubia Angie
Fecha: 14/05/2023,
Categorías:
Anal
Autor: Tonyzena67, Fuente: CuentoRelatos
... veces, hasta llegar a su perineo donde se arqueó con sus largas piernas porque intuía que le quería succionar el ojete. Me ofreció su culo para que se lo chupara y definitivamente se estaba dando toda esta linda chiquilla. Quizá fueron unos 7 o 10 minutos de ese masaje oral, cuando Angie explotó con su primer orgasmo y pronto tomé posición para hundirle mi verga en tan estrecho y jugoso orificio… solo jadeaba del placer y entre más fuerte eran mis envestidas, más gritaba del placer. Con los minutos ya que ella estaba más relajada, le dije que estaba a punto de venirme y ella se ha puesto de rodillas y me ha dado otra mamada y le dejo ir mi descarga y veo como por su boca escurre toda mi esperma acumulada por una semana.
Nos fuimos a bañar juntos, donde seguimos tocándonos y donde puse a Angie en cuatro en la esquina del baño y comencé a chuparle el culo por largos minutos. Que ricas nalgas tiene esta niña, tiene un culo redondo y bien puntiagudo que no se podía imaginar cubierto por su falda y su chaleco. A la vez, le chupaba su panochita, mientras mis dedos se hundían en su apretado culo. Sabía a lo que iba, pues cuando sintió que cambiaba mi posición, puso sus nalgas más niveladas con mi miembro, el cual sintió cuando se lo ponía con mis manos. Solo me dio una advertencia: ¡Hazlo con mucho tacto, nunca me han cogido por ahí! – me tomé el tiempo necesario y con los minutos, mi glande desapareció de tanto intentar meterlo y ser rechazado por el ojete tan apretado de ...
... esta rubia… eventualmente mi glande desaparece y el resto de mis 24 centímetros de mi verga están en las entrañas de esta niña que solo gime de dolor o de placer.
Su panocha escurre abundante jugos y comienzo con mis dedos a chaquetearle la panocha, haciendo más énfasis en su clítoris que se siente duro e hinchado. Está en una posición de perrito, pero a la vez me da oportunidad de llegar a su panocha donde mis dedos masajean constantemente su clítoris. Cinco minutos así y explota con un orgasmo que le hacen temblar las piernas y el culo, pues siento ese vibrar también en su ojete. Le pasa en un par de minutos y le sigo pompeando el culo y vuelvo a chaquetearlo el clítoris y le vuelve a ocurrir, pero esta vez parece ser más fuerte. Grita que se viene y solo me dice que no pare, que le destroce el culo. Nuevamente hacemos una pequeña pausa siempre con mi verga bien enculada y seguimos a hacer lo mismo. Tuvo tres orgasmos bien seguidos y al tercero la acompañé y me vine en su rico culo. Pude ver como mi esperma salía de su rico culo y a la vez una línea de sangre que se mezclaba cuando caía en la superficie del baño.
Nos seguimos bañando, nos hemos vuelto a secar y a seguirle cogiendo el culo por más de una hora. Pensé que ya no aguantaría, pero Angie creo que tuvo por lo menos 7 orgasmos aquella tarde, en lo que ella no sabía explicar donde sentía el placer, pues con su inexperiencia en el sexo, no sabía distinguir si eran en sí orgasmos anales o del clítoris, o orgasmos ...