Lara Croft. El libro, el anciano y la Diosa
Fecha: 30/05/2023,
Categorías:
Humorísticos
Autor: Solitario, Fuente: CuentoRelatos
... entre sus piernas. Lara también se percata que aún conserva sus genitales femeninos, “igual que Anjali” comenta y ahora comprende porque la estatua la representaba como hermafrodita.
Un golpe en la puerta la hace saltar, “¿Quién es?”, “servicio del hotel” le responden y Lara corre a buscar una bata para cubrirse, la amarra bien al notar como su verga presiona y se marca bajo la misma. “Como rayos los hombres pueden andar con esto colgando” se queja. Trata de mantener la compostura lo mejor que puede y abre ligeramente la puerta viendo a una joven mucama. “Hola, venia pasando cuando escuche un grito, esta todo en orden”, “oh si, solo que vi una araña y estas me aterran” responde Lara, “ya veo, es que hemos tenido algunas quejas por lo mismo, déjeme revisar los repelentes y cambiarlos si es necesario”. Con algunas dudas Lara la deja pasar y cierra la puerta mientras trata de disimular su “condición” lo mejor posible.
“Están vencidos los repelentes, déjeme cambiarlos por unos nuevos” dice la muchacha que se inclina mientras instala los repelentes nuevos. Al hacerlo su uniforme se aprecian unas bellas caderas y un trasero bastante atractivo. Lara la observa detenidamente y pronto siente algo entre sus piernas, para su sorpresa está teniendo una erección la cual es notable, al punto que se excusa dirigiéndose al baño donde literalmente se esconde mientras la mucama sigue trabajando. Por la rendija de la puerta la observa mientras va de un lado para otro en la habitación. ...
... “Vamos, vete luego” dice en voz baja sintiendo que su verga va a explotar. Sin duda es una muchacha guapa, muy guapa. El color de su piel, la forma de sus ojos una belleza exótica que comienza a excitar a Lara que de manera involuntaria comienza a hacerse una paja a escondidas. Amaira, dice su credencial, “vaya que estas buena” murmura Lara mientras la espía y se frota su verga que esta dura y erecta.
Amaira recibe una llamada en su radio, “¿Dónde estás?” le pregunta alguien, “en la habitación 69, problema con las arañas otra vez” y al poco rato se oye un golpe en la puerta y otra mucama aparece. Una mujer mayor, aunque también poseedora de esa belleza exótica de las mujeres hindúes. “¿Está desocupado este cuarto?” le pregunta Priya, según se lee en su credencial, “no, la huésped esta en el baño, se topo con una araña y el grito se escucho en el pasillo, por eso vine a mirar y a cambiar los repelentes”. Ambas conversan un instante mientras Lara esta que hierve en el baño, ahora ya no disimula, se hace una furiosa paja mientras las observa a ambas que conversan de todo un poco.
“Ya no doy más” dice Lara que está totalmente invadida y poseída por una lujuria que ya no puede controlar. Aprovechando que ambas están distraídas mirando por el balcón Lara sale del baño envuelta en su bata y pone el cartel “no molestar” en la puerta y la cierra con seguro. En ese momento Amaira y Priya ven a Lara y deciden retirarse. “Bueno ya cambie los repelentes así que ya no tendrá más ...