Azhar
Fecha: 21/06/2023,
Categorías:
Erotismo y Amor
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... empleado de este hotel ha llegado tan alto en tan poco tiempo, el Sr. Kamil se fijo en ti el primer día que llego, mando averiguar todo sobre tu vida y esa es la recompensa por tu trabajo y esfuerzo, aquí tienes las llaves de tu nueva casa, la dirección del colegio para tu hija y tu nueva nomina con el aumento ordenado. Ahora, vete a buscar a tu hija y cuéntale lo que te ha pasado.
Cuando vi llegar a mi madre a buscarme al colegio, cosa que nunca hacia, por causa de su trabajo, me asuste, en un principio pensé que la habían despedido y que no quería asustarme, pero según se acercaba, note en su rostro más iluminado, lleno de alegría y sus bonitos ojos azules más brillantes, cuando llego a mi lado, me abrazo y se puso a llorar, me cogió de la mano y nos alejamos del colegio en dirección a un parque cercano, tras sentarnos en un banco me dijo:
- Azahar, se acabaron nuestras penas y estrecheces, me has subido el sueldo un 200%, me han dado un piso para vivir y no tendremos que pagar nada.
- Pero mamá, que ha pasado, porque todo eso.
- El Sr. Kamil, ese señor que siempre que viene me entregan un sobre, te acuerdas?
- Sí, que pasa.
- Ese señor es el dueño del hotel, desde el primer día que llego, se intereso por el personal y en especial por mí, por mi trabajo, como lo hacía y siempre con alegría, pues como premio me ha subido el sueldo, me manda a vivir a un ...
... piso que es suyo, sin pagar nada, me ha nombrado su secretaria particular para atender a la persona que me indiquen cada vez que venga y además a escogido un nuevo colegio para ti, dejas este colegio y entras en uno nuevo.
- Pero mamá, yo estoy contenta con este colegio, mis amigas vienen a este, allí no tengo amigas.
- No te preocupes hija, ya verás como pronto tendrás amigas, si quieres ahora vamos a comer a un restaurante y después vamos a ver el nuevo piso, tengo las llaves.
- Bueno, por un día que salgamos de la rutina comeremos las dos juntas.
Entramos en un restaurante, no era de 4 tenedores, no estábamos acostumbradas a muchos lujos, fuimos a uno más normal almorzamos una pizza para las dos y después yo tome una carne y mi madre un pescado, y de postre helado de chocolate.
Seguidamente fuimos a ver el piso, era en un barrio de clase media pero con unas comodidades que no teníamos, tres dormitorios, un amplio salón, una cocina con todos los electrodomésticos calefacción y agua caliente, teléfono TV, al abrir los armarios de las habitaciones, estaban llenos de ropa, en el dormitorio principal, ropa nueva para mi madre y en el segundo ropa para mi, toda la ropa era de su talla y la mía era un poco grande, pero muy bonita. Las estrecheces desaparecían de nuestras vidas, prometi a mi madre que cuando pudiese quería darle las gracias personalmente al Sr. Kamil