Sesión doble en el cine
Fecha: 12/07/2023,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: Chiriflu, Fuente: CuentoRelatos
Ella y yo estábamos en la cola de la taquilla solos, sin acompañante. Eran multicines y un jueves a las 4, por lo que había muy poca gente más.
Debía tener cerca de 60 años pero lucía un cuerpo espectacular tras un vestido negro entallado y tacones. Pelo rojizo y un moreno en la piel que denotaba una evidente ausencia de obligaciones laborales.
Llevaba muchas pulseras, un colgante que descansaba en su interminable canalillo y pendientes con pinta de caros. Todo ello con una cara maquillada muy sensual y morbosa. Era una auténtica loba, y al verla no pude evitar quedarme en la fila.
Ella me miró de reojo cuando los dos estudiábamos los carteles de las diferentes películas
-¿Cuál vas a ver? dejó caer sin dejar de mirar la oferta, pero situándose a mi lado. Su voz grave y sensual, mezclada con su fragancia me cautivaron.
-Pues si puede ser, la misma que tú, porque si no me gusta te miraré todo el rato y eso ya compensa con creces el precio de la entrada.
-Jajaja, adulador, si podría ser tu madre.
-La edad es sólo un número y tú eres una diosa de la belleza y el morbo tengas la que tengas.
Se mordió el labio y me miró de arriba abajo divertida.
-¿Qué te parece la película documental polaca sobre la minería y su transformación?
-Perfecta, no habrá nadie más que nosotros y podremos sumergirnos bien en la trama, o donde sea…
Sacamos las entradas y nos encaminamos a la sala. Me dijo que fuese entrando y se adelantó para pasar por el WC. Sus piernas ...
... eran un escándalo, se notaba que hacía ejercicio diario y el culo se intuía duro y bien puesto.
Cuando entró me lanzó un tanga minúsculo negro y un sostén con una copa enorme.
-Guárdamelos, que quiero ver la peli más cómoda…
No había terminado de decirlo y ya tenía una erección de caballo.
Cuando la miré las tetas se transparentaban completamente y los pezones duros amenazaban con salir a ver la película. Me pilló antes de desviar la mirada y disimular.
-Ufff, se me escapó sin querer…
Se río de mi reacción y se las sacó un momento para que las viera.
-¿Te gustan? -preguntó sabiendo perfectamente la respuesta.
Asentí como un adolescente primerizo porque no acertaba a vocalizar y se las volvió a guardar dentro del vestido, no sin esfuerzo.
-A ver que tienes tú para enseñar, comentó girándose hacia mí. Lo que tenía para ella estaba ya más duro que el tobillo de una cabra.
Mire a los lados y como seguíamos solos me bajé el bermudas elástico y mi pene salió como impulsado por un muelle. Sus dimensiones la cambiaron la cara y la provocaron un exceso de saliva en sus carnosos labios rojos, que se deslizó por las comisuras.
-¡Pedazo de polla que tiene mi niño!
En ese momento apagaron las luces y me la agarro sin miramientos, con sus manos suaves y cuidadas de uñas rojo-pasión. Yo me abalancé a besarla, pasando mi brazo por detrás y llegando a agarrarle uno de sus tremendos melones.
Empezó a pajearme mientras nos mordíamos las lenguas. Estábamos ...