La semana que disfruté a mi cuñada (II)
Fecha: 24/07/2023,
Categorías:
Infidelidad
Autor: JUANFRANK, Fuente: CuentoRelatos
... dice “Paco, se te puso bien dura”, a lo que le contesté “Así me tienes cabroncita, bien caliente, ahorita que lleguemos a nuestro nidito de amor, te voy a dar verga riquísimo”, correspondiéndome con una mirada de maldad en su rostro, lo que hizo que me pusiera súper excitado, tarde se me hacía llegar a las suites y registrarnos y que nos dieran la habitación para cogérmela.
Ya dentro de la habitación que en realidad era un estudio, es decir habitación, sala, baño con jacuzzi, cocina, la tomé de la cintura y la pegué a mi cuerpo, y le dije, “ahora sí mamacita, ven para acá, ahora si vas a saber lo que es hacer amor en cuerpo y alma”, respondiéndome “papito me vas a comer toditita?”, “te voy a dar cogida tras cogida, vas a ser mía y vas a querer más, te voy a comer, estas bien sabrosa”, “cabrón tus palabras me excitan mucho” fue su respuesta y me empezó a besar, primero metiendo un poco su lengua a mi boca, correspondiéndole yo de la misma manera, tome su nuca y sus riquísimas nalgas con mis manos y empecé a traerla más a mí, sentía como sus besos eran sinceros.
Por mi parte le agarraba sus nalgas arriba de ese pantalón negro, seguí por besar su cuello, lo que hizo que empezará a agitarse y a respirar muy profundo, mi verga empezaba a pararse y la restregaba con su vulva, aún con pantalones, agarraba sus nalgas a placer, estando de tal manera, desabroche dos botones de su blusa y se la quité, ella para no quedarse atrás me quitó la corbata y me desabrochó mi camisa, mi ...
... verga completamente dura, la seguía restregando con su puchita, ya estábamos demasiado calientes, notaba su excitación, veía como sus senos atrapados en su brassiere empezaban a subir y bajar.
Le bajé su pantalón con dificultad puesto que le quedaba bien apretadito, le dije “Qué buena estás, ahora si te voy a disfrutar, vas a gemir y gritar a mi antojo”, para esos momentos ella ya gemía, “mmm, uff, ah, ah” y decía “Sí papacito, hazme tuya, gózame, quiero ser toda tuya”, yo estaba demasiado caliente, la retiré de mí y di unos tres pasos hacia atrás, a lo que ella se sacó de onda, y le dije “quiero verte con esa lencería que traes, mira que rica estás, eres una diosa que se la va a comer su macho”, notando que esa frase la ponía más cachonda y me dijo “quítate el pantalón, quiero ver tu miembro”, quitándomelo de inmediato, y le dije “Zandra, quiero que con tus manos te acaricies los senos y tu puchita, restriégalos”, ella sin dudar, me dijo “Eres un cabrón caliente, me voy a derretir”.
El verla la forma en que se tocaba sus senos y su pucha, me puso bien caliente, de ella ya salían expresiones que no entendía, solo “mm, agg, agg”, deje que estuviera un par de minutos, venía como uno de sus dedos lo pasaba por su almeja, mientras yo me empezaba a masturbar, viendo a mi diosa haciendo lo mismo, no aguante más, me acerqué por atrás y le besé su espalda, atrapé su cintura y le restregaba mi verga ya gruesa y firme contra sus nalgas, sentía como cada rincón de su cuerpo se ...