Adelaida y Helena dos primas inseparables - Relatos Eróticos

Adelaida y Helena dos primas inseparables

Adelaida no podía ocultar su emoción, la acababa de llamar su prima Helena para decirle que al otro día llegaba para pasar el fin de semana juntas… esa noticia aseguraba un encuentro lleno de pasión y de situaciones pecaminosas pero excitantes…desde muy niñas ambas mujeres llevaban no solo un parentesco muy cercano ,una amistad casi fraternal sino que eran dos amantes ocasionales…todo empezó cuando eran niñas y experimentaban por primera vez las curiosidades sexuales…querían saber cómo se besaba y juntaron sus bocas para experimentar como era dar y recibir un beso en la boca…querían mirar de primera mano los cambios en sus cuerpos cuando llegaban a la juventud…así notaron , sintieron y se admiraron de ver el levantamiento de esos senos que ahora mostraban orgullosas… besaron, chuparon y degustaron esos pezones grandes y rojos que parecían deliciosas moras, se extasiaron al ver como las pubescencias de sus vaginas cubrían esas hermosas vulvas de un tapiz dorado…chuparon por primera vez y cataron las mieles de sus efluvios vaginales…metieron sus lenguas y sus dedos en esas grutas vaginales vírgenes y disfrutaron de las caricias táctiles en las paredes más íntimas…empezaron a probar posiciones para optimizar el goce y el placer…encontraron en el 69 una posición óptima para saciarse de sexo descansadamente…sus orgasmos eran compartidos plenamente…habían probado muchas cosas, posiblemente quedaban algunas variantes que experimentar pero una cosa si era muy clara, cuando esas dos ...

... primas se juntaban era dinamita pura sexualmente hablando…en los últimos encuentros Helena se había caracterizado por traer algo nuevo para compartir con su prima y esa era una excitante espera que hacía más expectante el nuevo encuentro… Al día siguiente en pleno atardecer cuando las primeras sombras cubrían la campiña llegó Helena en su carro, Adelaida salió a encontrarla… miró a ver si alguien la acompañaba pero inicialmente no distinguió a nadie, de pronto de la puerta trasera salió un gigantesco perro, era un labrador Golden Retriever dorado, Helena abrazó a su prima y le estampó un largo beso en la boca, Adelaida no pudo contenerse y mientras besaba a su prima le apretó las nalgas con ganas, parecían una sola persona de lo unidas que estaban…mientras esto sucedía el perro nervioso olía el trasero de su dueña y luego corría a oler el trasero de la prima…nervioso saltaba y corría en círculos…las dos primas tomadas de la mano ingresaron a la casa, el perro lo dejaron afuera. Helena subió a descargar su equipaje mientras Adelaida sacaba una botella de vino que tenia en la nevera, Adelaida tenía un pequeño short y una blusa suelta que dejaba las esplendorosas tetas balanceándose lujuriosamente…se sentó en el sofá preferido a esperar a su prima…Helena recién bañada se colocó una bata trasparente para cubrir su cuerpo…sólo eso llevaba puesto…su triángulo púbico negro contrastaba con la albura de su bata, sus senos grandes y provocativos reposaban sobre el torso blanco…se sentó ...