El regalo
Fecha: 02/08/2023,
Categorías:
Lesbianas
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... hacia la boca agua viendo como Lara enjabonaba aquella polla de látex. Volvimos a la habitación y ayudé a Lara a colocárselo en la cintura. Se quitó las bolas chinas y se las comio sin compartirlas conmigo. La parte trasera de la polla tenía una zona para masajear su coño mientras me penetrase. Yo me había metido de todo por el chocho pero cuando Lara me penetró sobre la cama sentí que era diferente, su cuerpo encima mía, sus pechos otra vez colgando sobre mí, me agarre a sus nalgas y ella empezó a follarme poco a poco, la polla era bastante grande pero entraba sin ningún problema, Lara estaba muy cachonda, al principio nos reíamos por lo insólita que nos resultaba la escena pero las risitas dejaron paso a nuestros jadeos, cuanto más me follaba Lara mas placer recibía ella del reverso de la base del falo, paró un momento para ofrecerme la polla, yo la chupé como había visto hacer a su hija varias veces, estaba empapada de mi jugo. Lara continuó follándome y ofreciéndomela para comérmela varias veces más. Al final se volvió loca y me follo con tal fuerza que mi cono goteaba, empape la sabana, yo acerque mi mano como pude al clítoris y me corrí en unos segundos. No estoy seguro si Lara lo hizo también pero cayó sobre mi jadeando empapada en sudor, su piel ardía y no tuvimos fuerzas ni para besarnos. La primera en moverse fue Lara, se quito el arnés, la polla aun estaba empotrada en mi chocho, la sacó con cuidado y empezó a chuparla, yo aun disfrutaba de mi orgasmo pero al ver ...
... sus labios redondearse para metérsela en la boca ya pensaba en el siguiente. Nos besamos y me ofrecí a Lara para lo que apeteciese, pensé que me pediría que ahora la follase yo pero su respuesta fue: hazme lo que más te apetezca, ese es mi deseo. Estas segura? Le pregunte. Su respuesta fue afirmativa. Fui a mi habitación y volví con mi ordenador portátil, lo coloqué sobre la mesita de noche y empecé a reproducir aleatoriamente las fotos del día anterior. Lara se giró hacia su lado izquierdo sentada sobre la cama, yo me puse en su espalda las dos apoyándonos sobre las almohadas, la abracé y besé su espalda y su cuello. Le susurre que ayer me había quedado con ganas de verlas juntas en el salón.
-Lara. Estuviste espiándome?
-Ana. Me corrí dos veces mientras lo hacía. Vas a castigarme?
No hubo más respuesta que un profundo suspiro. Yo agarré su enorme trasero y empecé a acariciarlo sin prisa. Lara se acomodo para que lo tuviese a mi entera disposición. Enseguida mi impaciencia me pudo y empecé a masajearle el ojete, tome algo del abundante jugo de su chocho en mi dedo y fui metiéndoselo poco a poco, ella movía sus caderas para exponer mejor su mercancía y al final con una pierna flexionada y la otra más estirada, dejo a la vista la entrada del culo y el chocho. Me hubiese gustado hacerle una fotografía en esa postura. Lara no se cansaba de mirar nuestras fotos y su respiración me excitaba muchísimo, yo ya podía meter y sacar mi dedo con total facilidad, la postura me ...