1. El pollón de mi suegro


    Fecha: 01/07/2018, Categorías: Incesto Autor: CalientaMaduros, Fuente: CuentoRelatos

    ... curiosidad jeje.
    
    Después el me confesó que alguna vez también nos había escuchado follando a su hijo y a mí. Y agregó que su hijo me aguantaba muy poco. Entonces me dio una caricia por el pelo y me abrazo un poco diciéndome:
    
    -Ay pobrecita, lo que tienes que aguantar.
    
    Yo le di unos besitos en la mejilla y le dije que eso a su mujer no le pasaba, que ya lo escuchaba yo y que ahora sabía que con más motivo.
    
    Él me pregunto qué porque ahora con más motivo. Entonces yo le respondí:
    
    -Porque tienes buena polla.
    
    Los dos nos miramos en silencio y nos reímos. En ese momento bajo su mujer. Al poco me tuve que ir, ya que entraba a trabajar en el supermercado.
    
    Al finde siguiente, volví a quedarme a dormir en casa de mi novio. Y de nuevo, lo volví a escuchar como follaba con mi suegra. Cuando terminaron, él se bajó a la parte de abajo de la casa. Yo aproveche y fingí que iba a por algo a la cocina y también baje para toparme con él.
    
    Entonces lo vi. Mi suegro iba en calzoncillos. Aun así no le importó. De hecho saco un par de cervezas y se las tomo conmigo en el salón.
    
    Nos pusimos hablar y la conversación fue subiendo de temperatura.
    
    Yo le dije que le había vuelto a escuchar y que suponía que se habría quedado aún caliente, porque solo había escuchado a su mujer gemir pero no a él gemir como si se corriera.
    
    Él me confesó que aún no se había corrido y que de hecho aún la tenía dura.
    
    Yo le conteste que con ese pollón que tenía normal que su mujer se corriera ...
    ... tan rápido.
    
    Él me pregunto:
    
    -¿Todavía te acuerdas de ella?
    
    Yo le respondí que algo, aunque se me empezaba a olvidar.
    
    Él entonces se la sacó y me la enseñó. En ese momento me dijo:
    
    -La recordabas así??
    
    Entonces volví a ver ese falo tan grande que tanto me había impactado la otra noche y que pese a que la de mi novio no está mal, efectivamente era mucho más grande que la de su hijo.
    
    Entonces añadió:
    
    -Puedes cogerla si quieres para verla de más cerca.
    
    Yo le obedecí y se la cogí.
    
    Le dije:
    
    -Tienes buena polla. -Y entonces empecé a movérsela despacito.
    
    Le dije que no era bueno que se fuera a la cama con ese calentón, que lo mejor era que se pegara una buena corrida antes de irse a dormir.
    
    Mi suegro me dijo:
    
    -¿Quieres ayudarme?
    
    A lo que yo le respondí:
    
    -Vale voy a ayudarte. –Y le empecé a pajear más rápido.
    
    En ese momento nos empezamos a besar. El metió su lengua dentro de mi boca, mientras yo le movía la polla. Él quiso meterme la mano por debajo del pantalón pero le dije que no podía hacer nada porque tenía la regla. Que se relajara y disfrutara. Pero que otro día me debía una recompensa.
    
    Después metí ese palo gigantesco dentro de mi boca. Cuanto más le escuchaba gemir, más ganas tenia de comérsela y de hacerle disfrutar. Me moría de ganas de sentir como estallaba en mi boca.
    
    Al final termine pajeándole súper rápido con las dos manos hasta que se corrió, salpicándome sus gotas por mi cara y mi cuello.
    
    Mi suegro se acercó ...