Relatos eroticos esposos complices cap 18 - Relatos Eróticos

Relatos eroticos esposos complices cap 18

Para culminar mi relato del capitulo anterior prosigo

Veía por el espejo nuestras siluetas de madre e hijo esforzandonos cada uno por darse satisfacción plena a costa del otro. El con todo el ímpetu de su juventud queria arrancarme la carne mediante sus caricias, besos y mordiscones aparte de la punta de su pinga que ya estaba hincando y yo lo miraba orgullosa de ser yo quien lo estuviera bautizando como hombre, como un verdadero macho, y senti pena no poderselo decir.

Llegó su lengua a mi concha y con desesperó me chupo todos mis jugos al mismo tiempo que metia sus dedos uno por uno en mi culo. Viendo que su pinga si bien es cierto es muy dura la tenía mas pequeña, tuve que agenciarme de dos almohadas para levantar mi concha y así en pose de misionero hacerlo que goze más de su madre.

Como ya sabía me lo clavo de golpe y soportando el dolor comenzó con unos movimientos salvajes por más o menos 15 "minutos, y besándome en la boca me dejó otra buena porción de leche pero esta vez en mi concha. Poco a poco se fue de costado liberandonos para descansar un rato. Quiso continuar pero por el tiempo acordado con mi esposo no podia ser, asi que con pena toque la puerta para que mi esposo lo llrve a su cuarto mientras yo me aseaba en el baño.

Volví a tocat en señal de estsr lista para recibir a mi segundo hijo, pero no llegaba. Hubo un retrazo en el cine, al llegar mi esposo lo alistó como al primero y bajandole la toalla pude ver su herramienta gruesa y de 15 cms, al ...

... instante despues de darle un beso en la boca me agache a chuparle su pinga, por supuesto esmerandome ya que eran mis hijos, le mame cabeza, para luego morderle el centro del tronco por que así se hincha y se pone morada la cabeza, luego pasé otra vez a la cabeza, hasta que se desinche, luego voy a succionar los huevos hasta quererlos sacar de su bolsa, hasta que culmino la mamada metiéndome toda la pinga hasta el fondo de mi garganta y de ser posible incluyo tambien los huevos. Estaba en esa tarea cuando presenti que se venía, entonces me eche en la cama y él comenzó su trabajo, primero me beso en la boca con lengua acariciandome el pelo, luego bajó a mis retas dandole duro a mis pezones, de ahí bajó al ombligo para perforarlo pero siempte tenia sus manos inquietas, hasta que llego a mi concha y chupo exageradamente que parecia me hubiera sacado el útero y a la vez tenia dos dedos metidos en mi culo.

Con la pinga bien fura a punto de reventar lo colocó en la entrada y como era inminente ya estsba preparada lo clavó con salvajismo de un solo golpe hasta la raíz iniciando unos movimientos brutales y yo me mordía los labios oara no gritar, fueron cinco minutos sin variar su intensidad que vacío toda su leche en mi adolorida concha.

Una vez más gozaba ese espectaculo que me daba el espejo de vernos juntos como pareja cachonda y él sin saber que ese gozo se lo edtsba dando su madre. Despues de diez minutos de descanso y caricias se le volvió a poner dura su pinga. Entonces ...