camila - Relatos Eróticos

camila

... tenía agarrada de las caderas, dure como 10 minutos haciendo lo mismo hasta que mi cara quedó oliendo a culo, entonces decidí solarla de la cama y la ubique donde ella dormía en la cama de abajo y la deje boca arriba, le levanté las piernas aunque no fue fácil por la fueza que ejercía, entonces le amarré las piernas un poco a los lados para tener esa vagina para mi. Cuando se la ví, sentí que en serio era virgen y sin pensarlo, se la lamí pero solo por algunos segundos, pues ya no me aguantaba más, entonces decidír pararme y quitarme toda la ropa, cuando me quite los boxer mi verga salió de un tirón y ella empezó a gritar aún más, entonces suavemente me fui hacia ella y empecé a besarle las tetas nuevamente, después subí al cuello y empecé a besarla en la casa, la lamía con mi lengua y llegó el momento, agarre mi verga y con saliva lubriqué un poco y empece a rozarle el clítoris y masarjearla con mi verga, hasta que empece a sentir caliento y cuando no pude más, empece a empujarlar de a pocos en su vagina, se sentía que era estrecha, que era nueva, que era mi y cuando ya se la metí toda, empece a darle durísimo, sentía como mis huevas le pegaban en el culo y mientras ella gritaba y se interrumía por los golpes de las penetradas, me sentía en el paraíso. Estaba tan caliente esa vagina, tan rica, que casi me venía, me tocaba hacer pausas para aguandarme y seguir, yo creo que duré casi media hora así, dándole y dándole hasta que se acostumbró a mi verga, mientras la penetraba ...

... le agarraba el culo y empezaba a aprovechar el tocarle por encima el año con mis dedos, pero me aguantaba un poco más para hacer bien lo que quería.

Después de otro buen rato, decidír ir por el premdio mayor, entonces nuevamente la solté y la voltee y la deje rodillas contra la cama, nuevamente tenía ese delicioso y exquisito culo en mi poder, se lo volví a lamer y seguido, alisté mis dedos y empece a rozarla, entonces empecé a intentar meterle el dedo de la mitad pero estaba un poco reseco, entonces, me había traido aceite de cuerpo que había en la casa, me unte los dedos y le aplique en el ano, de manera que intenté nuevamente y mi dedo entro con una facilidad moderada, entonces empece a intercambiar dedos, mientras eso, me pare y la volvi a penetrar por la vagina, mientras eso, le decía mil cosas, que era mi perra, que ibamos a culear todo el día, que sería mia siempre mi puta. Al cabo de unos minutos, decidí darle por el culo, estrenarla con un sexo anal durísimo y rico, entonces, me parece y unte de aceite mi verga, le apunte hacia su ano que estaba ya un poquito dilatado pero aún muy estrecho, entonces suavemente lo fui dirigiendo y empecé a rozar primero, mientras ella se movía como loca desesperada llorando y gritando vanamente con la cinta en la boca. Duré un ratico rozando hasta que me decidí porque no me aguantaba más, empece a empujar y por Dios hijue.... era delicioso, estaba super apretado y sentía como si se me fuera a comer el pene con el culo, suavemente le ...