EL VETERANO DEL OMNIBUS - Relatos Eróticos

EL VETERANO DEL OMNIBUS

Mi familia emigro del interior del país asentándose en la capital, en pleno centro de la ciudad, un par de años después, lograron comprar una propiedad en el cinturón de la capital a una hora y veinte minutos de colectivo, así que, al encontrarme a punto de finalizar el último año escolar, me toco a diario hacer el viaje de ida y vuelta del colegio.
Por lo general al subir me dirigía al fondo del colectivo y dormitaba durante el viaje, uno de esos días, entre sueños siento que me empiezan a acariciar la pierna, entre abro los ojos y veo que a mi lado había un señor de unos 50 años, me acomode y al rato estaba rozando su pierna con la mía, que dicho sea de paso, debajo de la túnica llevaba un short, lo mire de reojo y el miraba hacia otro lado, no sé porque decidí abrir un poco mis piernas y el señor al notarlo, puso su mano sobre su pierna y al rosarme movía sus dedos sobre mi piel, eso me fue dando sensaciones que no conocía y se empezó a parar mi pequeña verga, siguió así hasta unas veinte cuadras de donde tenía que bajar y puso su mano en mi rodilla y la recorrió por mi muslo, al mirarlo se levantó asiéndome señas que lo siguiera, mire hacia la calle y al mirarlo parado en la puerta de bajada, solo me miro y bajo la cabeza, cuando el ómnibus paro y se empezó abrir la puerta, no sé porque me pare y decidí bajar del ómnibus atrás de él, me quede parado observando cómo se alejaba el ómnibus y estaba solo el señor y yo, frente a una plaza descampada, se acercó a mí y me ...

... dijo, la casa aquella pintada de verde es mía, quieres ir a tomar un refresco, moví los hombros hacia arriba y el comenzó a caminar y yo unos pasos atrás mirando hacia todos lados, al abrir la puerta entre sin decir nada, cuando la cerro, me di vuelta y al mirarlo él sonreía y me dijo, que lindo que sos, que edad tienes, le dije 12, y ya has estado con un hombre antes, no le dije, se acercó, me abrazo y una de sus manos acaricio mi pequeña verga dura sobre la ropa, dijo huy como estas, bien duro, mis piernas empezaron a temblar un poco y me dijo tranquilo, vamos al cuarto nos ponemos cómodos y disfrutemos.
En su cuarto mientras me besaba el cuello me fue desvistiendo hasta dejarme sin nada de ropa, después él se desvistió totalmente y pude ver por primera vez la verga de un hombre semi erecta, me abrazo y el contacto de su cuerpo con el mío me erizo todo, me dirigió a su cama y me acostó boca arriba, beso mi pecho, mi estómago y finalmente le vio unos besitos a mi verga, paso su lengua y finalmente me la empezó a chupar, se la metía toda dentro de su boca, mi excitación fue creciendo y en pocos minutos sin poder controlarlo empecé a botar mi leche en su boca, el seguía chupando, al rato se la saco de la boca, me miro y me dijo exquisita, me acariciaba y me fue dando vuelta lentamente hasta dejarme boca abajo, me agarro de la cadera y levanto mis nalgas, las abrió y sentí su boca entre mis nalgas, cuando su lengua empezó acariciar mi culito solo solté un gran suspiro presionando ...