Conociendo mucho mejor a mi abuela 4 - Relatos Eróticos

Conociendo mucho mejor a mi abuela 4

Fueron veinte minutos las caricias bucales que recibia por mi abuela en mi verga que no tardó en hacer efecto y culminé disparando toda mi lefa caliente dentro de su boca y mi mano la sujetaba con firmeza por sus cabellos rizados para que no lo soltará y siguiera chupando como una bebé hambrienta y no deje ninguna gota afuera y luego me dio una última mirada y cerró los ojos quedándose dormida.

Vi la hora y recién eran las 4.40 de la madrugada y estaba echado en la cama junto a ella y ahora era yo quién  no podía dormir,  sabía que  ya no se iba a volver a repetir esta experiencia junto a mi  abuela ya que ella vivía en el extranjero y se iría en unos días más del país.
Ya había llegado lejos quería más así que mi mano fue bajando y le tocó las nalgas y se las abró para meter mis dedos acariciando su vagina y estaba húmedo ese rico agujero, durante unos minutos la fui calentando soltó un gemido de placer y luego vino otro más.

-! Ahh. hum.. humm.. ¡

La puse de costado y en pose de cucharita le fui metiendo la verga, era una sensación tan rica y con el morbo encima, que quién me estaba cachando era a mi abuela lo aumentó y los movimientos de mi pelvis cada vez era más fuerte.

-! Ahhh... ahhh.. sii abuelitaaa.. ¡

Yo estaba ya tan caliente que no media la fuerza de la penetracion  moviendole su culo cada vez que l metía y sacaba mi verga dentro de ella, cuando mi abuela ya iba de a pocos reaccionando al sentir que era penetrada volteó la cabeza y abrió los ojos ...

... para ver quién era el que le metía la verga con fuerza y me vio.

-! Noo.. sigas soy tú abuela...ahh.. ahh.. yaa.. detenteee..sacármelo ahh.. ¡

Pero ya era demasiado tarde para echarme para atrás  e hice todo lo contrario seguía metiéndole ahora con más fuerza todo el pene en su caliente chucha y ahora cada vez eran más débiles sus palabras de negativa y aumento sus gemidos.

-! Ahhh.. ahhh... nooo.. ahhh.. ¡

Mi abuela ahora me miraba como le estaba metiendo toda la verga  y tenía una mirada de mujer que ya lo estaba disfrutando y se dio cuenta que también para ella era ya tarde negarse y se dejó llevar por el momento, ahora que tenía ya su consentimiento cambie de posición y le levanté una de sus piernas y seguí disfrutando de su chucha  mojada.

-! Ahh...mi hijoo.. ve despacioo.. .no seas tosco.. ahh.. así. está mejoor.. ohh quee ricoo.. mm. ¡

Luego mi abuela me dijo qué la dejé ahora a ella tomar el control y se subió sobre mi y con su mano apretaba mi verga hasta que se lo metió en su chucha y se sentó, y empezó a moverse bien rico, sus enormes tetas le saltaban a cada sentada que daba sobre mí.

-! Ohh. ohh... ohhh... mi niñoo. ya es todo un hombre y con una rica vergaa.. ohh.. ohh.. ¡

-! Sii.. abuelitaa.. ahí tienes toda mi verga es para tii.. ahh.. ahh. ¡

Cuando ella se fue al extranjero yo tenía cinco años así que al vernos después de muchos años éramos prácticamente unos extraños, no existía ese lazo familiar de nieto y abuela, sólo éramos una ...