Lo imposible - Relatos Eróticos

Lo imposible

... asistido, pues la señora y su esposo fueron muy grandiosas personas, cuya labor fue siempre ayudar y auxiliar a los necesitados, logrando ser un pilar para la comunidad de ése pequeño pueblo. 
Cinco años más tarde, y después de establecerse como la familia más rica del pueblo, en la fiesta de año nuevo, la familia brindaba y celebraba. 
Esa noche, Sarah no podía apartar la mirada sobre su padre, quien ya tenía unos tragos d de más. 
Lo miraba con sigilo y también con admiración; pues su padre era la viva imagen de aquel hombre que amó y que la hizo mujer. 
Aprovechando que su madre se encontraba muy ebria y durmiendo en la sala de recepción, se dirigió a la habitación de sus padres. Y al mismo instante su padre se dirigía a descansar en su cama. 
En la oscuridad, con tragos demás y sin percatarse de nada, el hombre hace el amor con la que cree que es su esposa. Besando su boca, amasaba sus tetas, besaba su cuello, con sus besos recorría cada lugar de esa hembra tan delicada y tierna. Al llegar a su vientre la besába con más intensidad, lamía y chupaba su sexo como únicamente lo hacía el hombre que la hizo mujer. Ella chupaba con lujuria y voracidad aquel enorme bulto que la había procreado. De forma intempestiva, el hombre la tomó de la cintura, se puso en posición y comenzó a penetrar a su hembra con todas sus fuerzas. Causando así varios orgasmos en la muchacha. La cuál no puede más y termina gritando el nombre de su abuelo mientras se venía junto a su padre. La ...

... sorpresa de este fue tan fuerte que de inmediato se separa de la muchacha. Gritos y reproches se escuchan en todo el lugar, la madre de la chica llega a la habitación y observa la escena. 
Sin inmutarse y con absoluta tranquilidad, la madre abraza a su hija, la acaricia y la besa. Unos segundos después ambas mujeres están totalmente desnudas y se dirigen hacia el confundido y muy excitado sujeto. La Madre toma el pene de su esposo y lo engulle como bestia hambrienta. La joven solo observa. La madre le ofrece el miembro de su esposo a la chica y esta de inmediato lo introduce hasta su garganta. Después de varios minutos, el hombre penetra a su esposa y a su propia hija. Las cuáles le confiesan que habían planeado eso durante meses, sólo para contarle la verdad. 
El abuelo había mantenido una relación con su nieta desde los quince años y la dejó embarazada. En uno de esos encuentros, la abuela y la madre los descubrieron. La madre quería denunciar al abuelo, pero la abuela por amor a su esposo, prefirió no hacerlo y compró el silencio de la mujer con mucho, mucho dinero. Pasó el tiempo, y con éste, la madre de Sarah también se convirtió en la amante del abuelo. El hombre de la casa había hecho suyas a su nuera y a su nieta, realizando verdaderas historias de amor, placer y secretos. 
Ahora era el turno del hijo tomar el lugar que le corresponde, como líder de la comunidad y de la familia. Era su turno de procrear a la nueva generación. Sarah le comunica a su padre que está ...