1. Tengo una hermosa Esposota Puta


    Fecha: 06/03/2022, Categorías: Confesiones Tus Relatos Autor: El Putasote de Alejita, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X


    TENGO UNA ESPOSOTA PUTA!
    Durante años yo me había cojido muchísimas putas de todas edades y tamaños, desde pendejitas apenas salidas de la adolescencia hasta mamitas reputas de más de 60 años, hembras muy preñadas, putitas blancas, alguna negra como la tinta, tetasudas, lisitas como nenas, y me las había gozado sometiéndolas a todo lo que me gusta hacerle a las hembras complacientes que conseguía o que me mandaban las entregadoras de putas, porque para eso están, pero cuando conocí a Alejita, supe que había encontrado a la puta de mis sueños.
    Eso sucedió en una mañana que le había pedido a mi entregadora de putas una pendejita muy complaciente para cojérmela sin límites, y ella me dijo: “Hoy te mando una madurita que te va a gustar!”, y cuando la elegida bajó y la vi, se me paró la pija como una estaca.
    Era Alejita, una hembra de 36 años, como supe después, Mamita de 2 pendejitas, con piel marroncita, cuerpuda y elegante, tetitotas chicas redondas y duras, con un vientrote y caderas carnudas de Mamita, simpática y sonriente.  Su cuerpo ventrudo indicaba que había tenido varios preñes y eso me excitó muchísimo, me gustó inmediatamente y me la llevé al hotel.  Lo que iba a ser una hora se convirtió en toda la mañana y la tarde y la gocé como a ninguna otra puta en mi vida.
    Ese fue el comienzo de mi amor por Alejita, porque encontré en ella a la hembra puta, hermosa y complaciente, que siempre había ansiado tener para cojérmela sin límites.  Desde esa primera mañana en el ...
    ... hotel, fui descubriendo en Alejita a la hembra a la que pronto llamé mi Puta Hermosa, en muchas cojidas le enseñé a dejarse hacer todo lo que me gusta, a tragarse mi pija entera aunque las primeras veces me vomitó encima, pero pronto pudo tragármela toda aunque se ahogaba cuando le tiraba mis acabadas en la garganta, pero nunca se quejó y se prestaba a mis engargantazos con entusiasmo de puta salvaje.  En una de esas tragadas espantosas, en que la tenía agarrada de la cabeza y le enterraba mi enorme pija en la garganta viéndola sometida por la boca, le grité: “Alejita, sos mi Puta Hermosa!  Te amo!”, ella aceptó serlo y la hice mi Esposota Puta para siempre, y a mí me llamó su Putasote.
    Le enseñé a aguantarse mis Aplastazos, tirándomele encima con todo mi cuerpo enterrándola en la cama una y otra vez, con Alejita resoplando sudada y reventada y sonando como una bomba, hasta que la dejaba destruida y mojada como mi Yegua.  Alejita, que trabajaba de puta hacía años, había nacido para eso, y yo le hice aflorar esa hermosa putez.
    Me excitaban sus ásperas Patitas Putas, como las llamé, ella se sorprendió pero aceptó en seguida que se las gozara y las adorara, y metida desnuda en el jacuzzi del hotel se las chupaba dedo a dedo y todas enteras metiéndomelas en la boca para luego llevarla a la cama, y abierta de muslos, mamarle durante horas la carnuda conchota haciéndola acabarse en mi boca dándome su salado jugo conchal.  Alejita pronto se hizo adicta a mis chupadas a sus divinas ...
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