Mi tía estrellita. Increíble!!! - Relatos Eróticos

Mi tía estrellita. Increíble!!!

Hola a todos, esta es una breve historia de lo que me pasó con mi tía cuando  tenía 16. No sé si logre algún alcance, pero por ser una de las anécdotas más épiapenascas de mi vida, quiero compartirla con ustedes. 

Yo cursaba 1ro de bachillerato vivía con mi padre, mi madre y mi hermano. Eramos una familia muy unida y estable. Tanto así, que recibíamos visitas de muchos de nuestros familiares constantemente.  

Fue así como llegó mi adorable y súper nerd tía Estrellita, una de las 4 hijas que tuvo mi abuelo afuera del matrimonio. De principio me parecía una idea bastante desagradable, ya que mi tía era muy seria y no le agradaba absolutamente nada. O al menos eso pensaba mi mente adolescente.  

Llegó el día de la mudanza y desde entonces yo no le daba ninguna importancia a su presencia. Ella por su parte se limitaba a hablar de forma exageradamente respetuoso. Un poco más y pedia permiso para ir al baño. 

Así pasaron meses hasta que nos logramos adaptar a su presencia en el hogar... yo por mi parte solo me limitaba a responder a sus preguntas más no sentía la necesidad de iniciar una conversación con una nerd. 

Un día de septiembre mis padres tenían que ir a actualizar sus datos en el registro civil de Santo Tomás, ciudad donde crecieron y se encontraba mayor parte de la familia. Dicho trámite duraba aproximadamente 3 semanas. Por los papeleos y firmas.  

Entonces me tocó quedarme todo ese tiempo con mi deteriorada  tía (según yo en ese momento). Los 2 ...

... primeros días fueron una odisea. Si había algo peor que su estilo, era su comida. Totalmente lamentable. 

Sin embargo empezamos a hablar mucho más en la hora del almuerzo y la cena.  Ella trabajaba pero llegaba justo para darme de comer.  

Entonces empecé a darme cuenta que en realidad era una mujer muy agradable y bella. Simplemente que se dedicaba más a sus estudios que a su imagen. 

Una noche, llegó tarde del trabajo. Se había soltado sus trenzas y se había quitado los lentes por lo cansado que había sido el día.  Yo como ya sabía algo de cocina, preparé algo rápido para los dos. Y justo cuando la iba a llamar para averiguar a que hora llegaba. Entro por la puerta, dejando caer un suspiro que me llegó a lo más profundo  de mis deseos. Un poco confuso ignore dicha sensación y la invite a que se pusiera cómoda para cenar. No sin antes echar un vistazo por su escote y su ajustada falda larga que solía utilizar. 

Fue así que llegó el fin de semana, ambos estaríamos en casa. Porque aparte de que tenía libre en  su trabajo, mis padres habían dado la orden estricta de no salir.   

El  sábado por la mañana me levanté muy tarde, cerca de las 2 de la tarde. Mi tía había estado estudiando y había pedido algo de comer. Aquí paso algo muy raro. La tía hipster me había esperado para almorzar juntos . Algo muy raro pero que me agradó un montón. Lo que no era tan agradable, era su vestimenta. Portaba una falda hasta las rodillas, plateada y algo ajustada al cuerpo, una camisa ...