1. Todo fue por necesidad


    Fecha: 30/07/2018, Categorías: Fetichismo Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... que se despertó cuando escucho un suspiro de provenía de ella. No podía esperar más, se arriesgaría a una cachetada o que su esposa escuchara los enojos de la joven pero estaba decidido, toco su abdomen y sintió que solo tenía una blusa para dormir, la empezó a alzar poco a poco y cuando estaba por lograr ver sus pechos, la mano de Daniela lo detuvo e inmediatamente le pregunto en voz baja: -¿qué está haciendo? -perdón niña, no debería estar aqui -¿porque me estaba alzando la blusa? Dígame la verdad Daniela veía la seriedad del señor por la pequeña luz que despendía un candil -la verdad iba a tocar tus senos y algo más… -¿Qué es eso más? -pues veras se me volvió un deseo el probar tu leche como lo hace tu niño -¿de verdad quería hacer eso? -sí, te rogaría porque que me dejaras hacerlo Daniela se quedó paralizada, no pensó que le fuera a decir eso el señor, aunque sabía que tenía un cuerpo llamativo, se encontraba en una situación extraña y no sabía que hacer -talvez me arrepienta de esto, pero dejare que lo haga con la condición de que no le diga nada a nadie -descuida, mi boca no se abrirá -venga aquí, acuéstese a un lado mío Don Rodolfo emocionado se acostó a un lado suyo y observo como la joven movía su blusa para dejar un seno descubierto -chupe con cuidado o me lastimara Se acercó con cuidado y olio el aroma de la piel de la mujer, metió el pezón en su boca y lo empezó a estimular con su lengua, la leche empezó a llenar su boca, era tibia y dulce, se sentía en las nubes; ...
    ... mientras tanto Daniela lo observaba y miraba a su alrededor con temor que alguien los descubriera, cerró los ojos e imagino que estaba en casa alimentando a su bebe. Al poco tiempo se vacío un seno de la chica y le ofreció el otro al señor al fin y al cabo también tenía que aliviarlos un poco; paso un rato y don Rodolfo bebió toda leche, como niño travieso se quedó disgustando el erecto y suave pezón de Daniela, la cual le dijo que ya debía irse a dormir, el señor la respeto y dándole las buenas noches la dejo descansar. Ya habían pasado 23 días desde que se había convertido en su nuevo hogar esa pequeña casa en las montañas, era el penúltimo día y cuando termino de lavar su ropa, decidió conocer un pequeño rio que estaba montaña abajo al cual debía caminar unos 15 minutos. Cuando llego vio que era un paisaje bello, completamente natural y ahí decidió darse un baño para refrescarse, se quitó la ropa y por precaución por si vieran se dejó su brasier y su pataleta. Estuvo hasta casi el anochecer, cuando empezó hacer frio se acercó a la orilla del rio y se acostó unos momentos, cerró los ojos unos minutos y durmió un poco; cuando los abrió se llevó un susto de infarto, don Rodolfo estaba encima de su abdomen sentado viéndola dormir, dio un grito y le dijo: -¿usted quiere matarme de un susto verdad? -no, yo sería incapaz de quererle hacer daño -¿entonces que hace aquí? ¿Por qué está sentado arriba mío? -pues veras note que no estabas en casa y salí a buscarte, y la encontré aquí ...