Desafío de galaxias (capitulo 24)
Fecha: 08/08/2018,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: calvito, Fuente: CuentoRelatos
... atacó Rulas 3 en un torpe intento de atraer al grueso de la flota federal hacia ellos. Con Opx apercibido, la batalla en tierra se limitó a la zona de aterrizaje de los transportes, e incluso en alguno de ellos, los soldados enemigos no llegaron a salir de sus naves. En cuanto a la orbita, entre la artillería de defensa planetaria, la flota de apoyo integrada por corbetas y patrulleras, y los poderosos sistemas de armas del Fénix, la flotilla enemiga fue pulverizada sin contemplaciones.
En Rudalas, con la flota bulban destruida, el general Ghalt embarcó en transportes, diez divisiones de la reserva al mando del general Cimuxtel, y desembarcó en la retaguardia enemiga, abriendo un tercer frente.
En el núcleo central, Clinio, encuadrado en la división de Pulqueria, agrandaba el perímetro en durísimos combates cuerpo a cuerpo. A su lado, el bocazas luchaba sin descanso sorprendido por la capacidad de combate, la valentía, y el desprecio a su propia vida del general. Incluso en una ocasión, el escudo del general se interpuso ante una bayoneta bulban que ciertamente le iba a herir.
Por los flancos, las 101.º y 103.º acorazadas ya operaban entre las líneas enemigas a las que habían sobrepasado. Los bulban intentaron retroceder pero se encontraron copados y para ellos, la batalla pasó de ser por la victoria, a ser por la propia vida. En medio de esta tremenda carnicería, el general Clinio fue herido por un arma de partículas en la cadera. La herida era fea, preocupante, ...
... pero se negó en redondo a ser evacuado. Hablo con el general Ghalt y le traspaso definitivamente el mando general de las operaciones, pero se mantuvo con el regimiento en el que se había integrado. Apoyado en una lanza bulban a modo de muleta, bajo la lluvia que lo enfangaba todo, avanzaba como podía, disparando su pistola contra los soldados enemigos, acompañado permanentemente por el bocazas.
Resuelto el problema en Rulas 3, Marisol traslado el Fénix a la zona segura de la órbita de Rudalas, durante el tramo final de las operaciones navales, donde Loewen estaba terminando de limpiar de naves enemigas todo el sistema. Estaba alarmada, las noticias sobre el estado de Clinio la tenían preocupada, pero no quería aparecer por la superficie para echar una mano. Por fin llegó la noticia del fin de las operaciones, la victoria era total, sangrienta, terrible. El general Clinio fue trasladado a un hospital de campaña y rápidamente Marisol, en una lanzadera, bajo a interesarse personalmente por su estado. Le encontró jodido, y mucho. Los médicos la dijeron que había perdido mucha sangre, y que su estado se había agravado por su negativa a ser atendido en el campo de batalla, salvo por los sanitarios de vanguardia. Aun así, los médicos consideraban que su vida no corría peligro, si su estado no se agravaba.
La matanza fue de una dimensión tan tremenda, que los cadáveres enemigos se sepultaron en fosas comunes, a donde eran conducidos empujándolos con excavadoras. El Fénix, embarcó ...