Natalia 1. Por la ventana
Fecha: 13/08/2018,
Categorías:
Jóvenes
Autor: dnpaxbobo, Fuente: RelatosEróticos
... eran muy grandes, pero estaban bien colocados, eran muy blanditos y redondos, con el pezón rosado y de buen tamaño.
En fin, yendo más a los detalles me gustaban mucho mis labios, que eran muy gruesos y de color carne, mis pies, que me los cuidaba mucho (en un tobillo tenía una pulserita muy mona), y mis ojos, que eran marrones muy claros y que con mi pelo, que era dorado, quedaban muy bien.
Con todo Lara al final me convenció para que fuera con ella a comprar ropa. Y así lo hice. Estábamos las dos en Zara y me dijo que me fuera probando la ropa que yo había elegido y que ella me traería al probador lo que le pareciera mono. Fui al probador, me desvestí y comencé a ponerme la ropa nueva. Cuando estaba quitándome unos pantalones que no me gustaban nada, Lara abrió la cortina de repente, dejándome a la vista cuando tenía solo una camiseta y las braguitas puestas. Me vio un chico de unos 20 años que estaba en el probador de enfrente. No me importo, pues apenas me vio dos segundos, pero noté que aprovecho para mirarme todo lo que pudo. Una vez estuvimos las dos en el probador con la cortina cerrada le dije:
-Pero tía, estas loca? Como abres así de repente, que me podrían haber visto todo.
-Ya tía lo siento no me di cuenta, es que tengo muchas ganas de que te pruebes esto y además… - Lara quedó en silencio y empezó a mirar fijamente mis piernas y mi trasero.
-Pero que miras? – pregunté con tono de sorpresa.
-Oye… ¿no te han crecido mucho los muslos y el culo? si ...
... antes eras como un alfiler…
Y además… ¿que firmes no? ¡A ver a ver! – y empezó a achucharme las nalgas como jugueteando.
-¡Estate quieta coño, no me seas lesbiana! - dije riéndome.
-Era broma tía jajaja, menudas curvas que tienes, la ropa que te traigo te va a quedar mejor de lo que creía.- y dicho esto dejó toda la ropa que traía en el banquito del probador. Había tres tangas, un par de sujetadores “push up” dos minifaldas, y unas cuantas camisetas bastante ajustadas. Me probé todo, y aunque a mi me parecía que iba un poco “fresca” con esa ropa, al final Lara me convenció, como siempre, y me lo compré casi todo.
De camino a casa decidimos ir primero a la de Lara para probármelo y discutir sobre que combinaciones me quedarían bien.
Llegamos, fuimos a su cuarto y empecé a ponerme la ropa nueva. Cuando estaba probándome un tanga de los nuevos la puerta del cuarto de Lara se abrió, era su hermano. Entró y me vio de espaldas a el, con el tanga puesto y nada por arriba. Yo justo me volví con las manos en los pechos desnudos y me agache para que me viera lo menos posible. Y él, aunque pidió perdón muy avergonzado, no apartó la mirada hasta que salio del cuarto.
-¡Pero tu hermano no sabe llamar a la puerta o qué pasa! Joder Lara, podías haberme dicho que podía entrar así como así en tu habitación, no me jodas.
-Ya tía lo siento, nunca lo hace, o llama o directamente no entra, no se que ha pasado. Si no lo conociera pensaría que quería pillarte desnuda. Lo siento ...