La esposa del Ingeniero (¿Pagando con la misma moneda?) - Relatos Eróticos

La esposa del Ingeniero (¿Pagando con la misma moneda?)

... prohibido.
No resistí mucho ese día tuve que sacarme herramienta que estaba muy rígida al ver semejante espectáculo.
Y no era para menos la esposa del ingeniero bufaba de placer y alentaba entre gemidos a que la siguiera clavando. 
Le puso sus nalgas enfrente para que la clavara de perrito, hasta afuera de escuchaba el choque de sus nalgas al entrar y salir del pito de aquel cabrón.
Sentí envidia de no ser yo el que disfrutara de esa mujer, y en vez de dejarlos continuar y  de interrumpirlos se me ocurrió algo.
Le mande mensaje al ingeniero diciendo que no se encontraba nadie en casa. El enseguida le marco a su esposa y esto los alertó, ella contestó y trató de disimular su agitación. Después ella miró por la ventana y nuestras miradas chocaron, se puso de pie y alcancé a ver su pubis depilado y sus nalgas contoneándose, buscando la ropa.
Me dí la vuelta y fingí retirarme.solo me alejé unas cuadras de la casa para darles tiempo de vestirse.
Después de recibir mensaje del patrón volvía a la casa y me abrió al tocar la puerta, entregándome la documentación que necesitaba su esposo. Era evidente que el tipo seguía ahí, me despedí mirándola en tono serio que ella sentía incomodidad.
Ya no podía dejar de pensar en el cuerpo de esa mujer que era prohibida para mi, pero según veía estaba al alcance de algunos suertudos privilegiados.
El universo me hizo justicia cuando sucedió algo en la familia, su padre cayó enfermo y como vivía en otra ciudad tuvo que hacer un viaje no ...

... planeado. Me encomendaron la misión de llevarla hasta allá en la camioneta, ya después el ingeniero se reuniría con ella después de salir de su trabajo. Esa oportunidad de oro no la podía desaprovechar, cuando pasé por ella a su casa se despidió de su esposo y sus hijas  y salimos a carretera. 
En tiempo de camino por autobús era de aproximadamente 12 horas, así que debido a la urgencia fui requerido por el patrón, para llevar a su linda y abnegada esposa a ver a su padre enfermo, en la camioneta nos hicimos 8 horas... bueno un poco más...
Sucede que íbamos platicando de cosas sin importancia, pero a ella le interesaba indagar que tanto sabía su esposo de lo sucedido en la casa aquella mañana. Fue directo al grano y me cuestionó, a pesar de que yo evadía la pregunta y argumentaba no saber de lo que hablaba. No me aguanté las ganas de decirle que lo que yo había visto era un secreto que me llevaría a la tumba,así como me quedaría en secreto la imagen de su hermoso cuerpo desnudo. Ella guardó silencio unos instantes y depués agradeció el piropo.
¿Qué pides ?... soltó la pregunta a quemarropa....
- ¿Perdón?... contesté yo-
No soy pendeja!!!.. el silencio no es gratis... ¿cuanto quieres?
En silencio miraba el camino debido a  que conducía , y depuués de mucho insistir por parte de ella le dije lo que ella esperaba tal vez....
¡La quiero a usted!....por lo menos una sola vez!!...
Ella sin mostrar sorpresa alguna  me dijo que me buscara un lugar donde parar, que la carretera ...