1. PLAYA ROJA II


    Fecha: 21/08/2018, Categorías: Intercambios Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... dorada que invitaba a pisarla, y lo mejor, estaba completamente solitaria. Puse proa hacia la orilla, y tras varar, entre Robertito y yo tiramos de la lancha hasta dejarla en seco. Miramos en derredor y nos quedamos impresionados por la belleza del entorno.
    
    Lo primero que hice fue quitarme el bañador, y Sara lo hizo a continuación, el mas reacio era el muchacho, se hizo un poco el remolón pero finalmente se quedo desnudo, y tengo que decir, aunque no manifestara interés, que me impresionó mas el cuerpo bellísimo del joven que el entorno, ya me imaginaba algo viéndole en bañador, pero de esta forma era una autentica escultura.
    
    Transportamos el bagaje hacia la zona que mas nos convenia y a partir de ahí, jugamos, nos bañamos, tomamos el sol y finalmente nos sentamos a comer.
    
    Sara nos repartió los bocadillos y de la nevera sacamos coca-colas y yo una bota con vino añejo de muchos grados que resultaba particularmente exquisito.
    
    Después fumamos un cigarrillo y nos tumbamos en las toallas a capear el sopor de la siesta, era tal el bienestar que no podia evitar una semiereccion caprichosa que tampoco parecia poder evitar el muchacho. No se cuanto tiempo estuvimos dormidos, pero al despertar se imponia un buen baño para despejarse, nos fuimos al agua a jugar con las olas, y entonces me di cuenta del oleaje que no habia cuando llegamos y que ahora alcanzaban una notable importancia que nos iba a hacer muy difícil salir con la lancha.
    
    No hable de ello para no causar ...
    ... alarma, pero cuando dieron las siete Sara empezó a pedir que volviéramos antes que se hiciera tarde. La mar se habia puesto incluso mas brava y no tuve mas remedio que pedirles calma y que esperasemos algo mas ya que asi era imposible salir. Pasó una hora y aquello seguia igual, y ante la insistencia de Sara que ya se estaba poniendo nerviosa, y contra toda prudencia decidi intentarlo. Subimos todo a bordo y acercamos la embarcación a la orilla, Sara y Robertito se acomodaron dentro, y yo intentaria remolcar la zodiac tirando por un cabo de proa, y cuando la helice no tocara arena, arrancarian el motor y saldrian a toda prisa a mar abierto, luego yo les alcanzaria a nado y nos libraríamos asi del rompiente de olas, pero esta debia ser una operación muy precisa y un retraso en el arranque del motor hizo que nos pillara una gran ola en plena operación. Fueron unos segundos, yo vi la lancha saltar por el aire y luego la ola que me envolvia y me arrastraba, y cuando pude incorporarme vi a mi esposa y el chico de pie en la orilla, con los brazos caidos y perplejos, aun no se habian hecho la idea de lo ocurrido, el motor, el deposito de combustilble, la lancha, remos, etc, todo estaba esparcido por la orilla. Corri hacia el motor y lo puse en seco, luego el deposito de gasolina y les pedi que retirasen todo lo que habia esparcido por la playa. Intente arrancar el motor pero fue en vano, le habia entrado agua y habria que llevarlo a un taller para limpiar. La tarde caia y me di cuenta ...
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