Por convenio mutuo me cogí a la joven sirvienta
Fecha: 22/08/2022,
Categorías:
Infidelidad
Tus Relatos
Autor: yy, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
Hola a todos soy Joaquin de 36 años. Casado con dos hijos. Mido 1.80 mt, soy corpulento, hago gym dos o tres veces por semana. Soy muy cachondo y la relación con mi esposa se ha enfriado desde nuestro segundo hijo. Y en el año 2021, mi esposa recibió a la sobrina de una comadre nuestra, como sirvienta, debido a la falta de empleo que la pandemia produjo. Cuando mi esposa me presentó a la nueva empleada doméstica, era un chica joven, de unos 20 años a lo sumo. De tez blanca, pecosa, ojos cafés, cabello castaño oscuro, de pequeña talla (1.57 mt), delgadita. La cual llamaré Any. Pues Any nos contó su historia, que tenía casí dos años de casada, su esposo desde hace unos seis meses se había marchado al norte por trabajo y ya había escrito que había llegado. Pero aún no conseguía trabajo, estaba con unos amigos. En esa espera, Any había agotado sus ahorros y no conseguía trabajo por la recesión de la pandemia y cierre de muchos negocios. Y como ella apenas tenía noveno año, la posibilidad de trabajo era menor. Así que nuestra comadre la recomendó para estar en la casa, ayudando en los quehaceres y en la cocina, pues ella comentó que sabía cocinar, que su mamá le había enseñado.
Todo iba bien, la pequeña Any se fue acostumbrando a nuestro estilo de vida. No había pensado yo en tener algo con ella. Hasta que.. una noche bajé a la planta baja de la casa, en busca de algún refresco, en eso escuché gemidos, oí que provenían de adentro de la casa, me fui sigilosamente y ...
... descubrí que venían de la habitación de servicio, es decir de Any, me fui acercando, y los gemidos eran más audibles, obviamente la puerta estaba cerrada, pero si era Any que se estaba masturbando, se notaba que la chica tenia sus necesidades íntimas no satisfechas. Otras noches bajé sin hacer ruido y en dos o tres ocasiones se repitió el mismo asunto, la pequeña Any masturbándose. La última vez me quedé escuchando y mi mente voló, me saqué la verga y comencé a jalarmela en su puerta, hasta que me corrí, hice algún ruido seguramente, porque Any allí adentro se quedó en silencio. Oí que ella se dirigía a la puerta, entonces me fui, pero dejé el piso manchado con mi esperma. Me fui directo a mi habitación y apagué la luz.
Al siguiente día, después de regresar del trabajo, entre a la casa, mi esposa no estaba, solo los niños, Any estaba en la cocina y entre por un vaso de refresco, Any que era una chica muy extrovertida, me dijo -don Joaquin, cómo me dejó sucio el piso frente a mi habitación anoche-, yo me quedé petrificado, ella encontró mi semen en el piso. Entonces yo también fui audaz, le dije -y que quieres que hiciera, si me excitó mucho escuchar como te masturbabas e imaginé como te metías tus dedos en tu chuchita-, ahora fue ella quien se quedó sin habla. Incluso se puso roja. Entonces aproveché ese silencio, para decirle -mira Any, yo se que tienes tus necesidades, tu esposo no está presente, y a mi me pasa similar, mi esposa ya no me complace, porque atiende a ...