1. Follado en el vestíbulo de la gestoría


    Fecha: 23/08/2018, Categorías: Gays Autor: danisampedro91, Fuente: CuentoRelatos

    ... acariciaba con su otra mano la polla y huevos.
    
    Me tenía totalmente fundido y entregado a él. En esos momentos podía hacer de mí lo que quisiera. Estaba que deliraba de gusto, me había llevado al clímax del placer.
    
    Después de unos minutos que me tuvo en aquella posición sin sacarme la erecta y enorme polla de mi culo, agarrándome por la cintura me fue levantando. Cuando me hubo levantado sin dejar de abrazarme, la enorme polla salió de mi culo, siguiendo estando totalmente erecta. Fue a buscar una silla de una de las mesas que había detrás de aquel mostrador, y arrastrándola por las ruedas, la dejó en medio del vestíbulo. Se sentó en ella llevándome a mí abrazado a él, y haciéndome sentar a horcajadas mirando para él.
    
    Dios, aquello parecía imposible, seguía estando totalmente erecta la polla, y ahora me la estaba metiendo otra vez. Cuando volvió a empezar a entrar en mi culo, abrazándome a él, empecé a correrme mientras me iba metiendo la polla. Grité abrazándome a él, ¡ohhh me corro, ooohhh me corro, me corro!
    
    Dios, me había corrido sin haberme tocado, fue empezar a entrar aquel enorme rabo en mi culito, y empecé a expulsar semen por mi polla. Le había bañado todo el pecho con mi semen, semen que le fui lamiendo, hasta habérmelo comido todo.
    
    Con la polla enterrada en mi culo, me tuvo abrazado a él comiéndome y besando la boca, luego mordió y la mío y chupó mi cuello, teniéndome sentado a horcajadas sobre él con la polla enterrada en mi culo.
    
    Aquel hombre ...
    ... era una auténtica máquina, pero no de follar, sino de hacer el amor. Porque aquello era algo más que follar, aquello era hacer el amor, pero el amor con mayúsculas.
    
    Después de por lo menos tenerme así durante unos 20 minutos, nos pusimos de pie, y ahora llevándome hacia una de las ventanas que daban a la plaza de Pontevedra, colocó mis manos sobre el alféizar, y abriéndome las piernas e inclinándome un poco, volvió a follarme. Ahora me estaba dando por el culo, mientras yo miraba por la ventana para la calle.
    
    Nada más colocarse detrás de mí abrió mis piernas colocándose en medio de ellas, me sujetó por las caderas, llevando mi culito hacia él. Tan pronto tuvo mi culito pegado a su pubis, metió El enorme rabo que tanto me estaba haciendo gozar aquella noche, en mi culo dando un movimiento a sus caderas. De un solo viaje me había enterrado todo el enorme rabo en el culo.
    
    Empezó a meter y sacar la polla en mi culo a una velocidad y profundidad que me estaba haciendo delirar. Me hacía poner de puntillas cada vez que me la metía, haciéndome gritar de placer.
    
    Si llega a ser más de día, cualquiera que pasase por la calle, podría ver perfectamente como me estaban follando. Aquello era algo excitante y que me hacía poner más caliente, solamente el pensamiento de que me vieran como me daban por el culo allí apoyado a la ventana, ya me excitaba y calentaba. Me gustaba que me exhibieran mientras me daban por el culo.
    
    Con solo aquel pensamiento, y el masaje que me daba aquel ...
«12...5678»