1. Sueño realizado


    Fecha: 23/08/2018, Categorías: Infidelidad Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... lamiéndole los pechos y los pezones con delicadeza, lo cual le ponía aún más caliente.
    
    Al mismo tiempo oía como al lado Judith empezaba a cabalgar con fuerza encima de Carlos y por los gritos que daba sabía que estaba empezando a correrse. Según lo que aguantara Carlos podía estar así un buen rato, teniendo un orgasmo tras otro y disfrutando como una loca.
    
    Cuando ya no podía aguantar más, empecé a follarme a Ana con todas mis fuerzas a lo que ella respondió, después de tanto rato de contenerse, con una serie de gritos de placer que indicaban claramente que se estaba corriendo. Aguanté todavía un rato más, en el cual ella tuvo varios orgasmos.
    
    Al cabo de un rato, note como Judith paraba de cabalgar encima de Carlos. Hubo varios movimientos en la cama y al cabo de un momento volvieron a empezar. Alargué la mano para notar que estaban haciendo y noté que Carlos se la estaba tirando por detrás. El me había comentado más de una vez que le encantaba esa posición, pero que a Ana le parecía que era de "guarra" hacerlo de esa forma, por lo que no lo hacían nunca así. En cambio, a Judith le encantaba ser salvajemente penetrada por detrás y muchas veces se ponía a cuatro patas para que yo me la tirara, por lo que deduje que sería ella la que había tomado la iniciativa de salirse y ponerse en esa posición. Además, ella sabía (yo se lo había explicado) lo que a Carlos le gustaba hacerlo por detrás y que Ana le dejaba, lo que le debió de dar más morbo todavía. Imaginé lo que ...
    ... estaría disfrutando Carlos...
    
    A mi se me ocurrió la idea de probar con Ana. Sabía que ella estaba muy caliente y que era probable que accediera. Saqué mi polla y le hice girarse boca abajo en la cama. Le levanté la cadera con suavidad y al ver que ella no ponía ninguna objeción se la metí hasta el fondo de golpe. Empece nuevamente con suavidad, disfrutando del placer de tirarme a Ana por detrás, cuando ni siquiera dejaba a su novio hacerlo. La verdad es que si por delante estaba buena, por detrás no desmerecía en absoluto.
    
    Mientras, oía y notaba, porque estábamos tan juntos que nos tocábamos todo el rato, como Carlos había empezado a penetrar con fuerza y rapidez a Judith. Ella no paraba de gemir y gritar. Se estaba corriendo una vez tras otra. Yo ya no pude aguantar más y empecé a embestir a Ana con todas mis fuerzas, descargando en cada embestida todo el deseo contenido durante tanto tiempo. Ella no paraba de gritar y gemir. Al cabo de un rato oí el grito de placer de Carlos que me indicaban que se estaba corriendo dentro de Judith yo también descargué todo mi semen en el interior de Ana. Fue el mejor polvo de mi vida.
    
    Nos quedamos un rato jadeando todos y al cabo de un rato ellas se fueron cada una a un baño. Detrás fuimos nosotros, esta vez cada uno con la suya. Estaba nervioso por la situación que se acababa de producir. Aunque yo sabía que me había tirado a Ana y que ella se había tirado a Carlos, y ella también lo sabía, como no habíamos hablado para nada y la ...