La historia de Ángel, solo era un muchacho (23)
Fecha: 28/07/2017,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: Albany, Fuente: CuentoRelatos
Sentí como besaba mis labios antes de levantarse y marchar al baño, me hice el dormido para no distraerle, Álvaro había dormido muy poco dando vueltas en la cama desde que pensó que me había quedado dormido y a veces con sus movimientos me despertaba.
Sabía que estaba preocupado, deseando acertar en la decisión que tomaran, y yo no quería insistir para forzarles a que lo hicieran por complacerme a mi aunque era lo que deseaba, que dispusieran de mi para los dos.
A veces pensaba que me había vuelto loco y no sabía explicarme que pudiera amar a los dos hombres tan locamente y desearles con la misma fuerza. Debía tener algo mal en mi cabeza o algún cable se me había cruzado para desear de tal manera estar, no solamente con mis dos amores, si no desear otros hombres cuando no me controlaba.
Bajé a desayunar con el móvil que me había enviado Eduardo en la mano, impaciente por descubrir lo que podía hacer con él, era un buen aparato y Pablo, como me había dicho, me tenía grabados los teléfonos de todas las personas que conocía, también de otras de las que no había oído hablar.
Lo dejé descansar sobre la mesa al ver como Victoria me miraba curiosa.
Los libros que Pablo me entregó me los enviaba Guido, no eran libros de estudio, se trataba de dos novelas que deseaba que leyera.
Una de ellas con demasiadas páginas de lectura como para animarme a abrirla, la dejaría para último lugar, “El juego del ángel” de Carlos Ruiz Zafón.
La otra más asequible y que no daba ...
... tanta pereza empezarla, “Escucha mi voz” de Susanna Tamaro. La abrí para leer la introducción y pensé que iba a ser interesante.
Al abrir el envoltorio apareció un sobre sin cerrar y que lo dejé pendiente hasta conocer de que trataban los libros. Era una simple nota que me emocionó.
Apreciado Ángel:
No deseo ponerte a trabajar desde ahora, quiero más bien que pases unos felices días en estas fiestas, y disfrutes la lectura de las dos novelas que te he escogido.
No es mi intención despertar tristes recuerdos, pero quiero que sepas que todos hemos estado contigo, a tu lado, desde el primer momento que nos enteramos de la noticia.
En parte nos sentimos responsables de que sucediera al salir de la academia aunque no tengamos culpa.
Le dije a Ian mi intención de enviarte los libros para que te entretuvieras, me rogó que te dijera que se siente arrepentido por su abuso, y que le gustaría pedirte perdón por lo que te hizo.
Creo que dice la verdad cuando afirma que sus sentimientos hacia ti no son los que expresó en aquel momento, que en realidad siente admiración y más que aprecio hacia ti. Si tiene oportunidad, y se lo permites, te lo dirá personalmente, de momento quiere que lo sepas.
Después de las fiestas nos pondremos en contacto contigo par seguir avanzando.
Un abrazo
Guido
Pensé un momento en sus palabras y también en lo que Ian pudiera sentir realmente, tampoco podía cargarle toda la culpa por no poder contener sus deseos, ahora comenzaba a ser ...