1. El Enfermero y el Interno


    Fecha: 29/08/2018, Categorías: Gays Autor: SebasPotterM, Fuente: SexoSinTabues

    ... camisa. Sin dejar de besarme, él empezó a quitarme la camisa y yo hice lo mismo con él. Madre mía este hombre de verdad era hermoso. Pectorales firmes marcaditos pero sin exagerar y aunque sus abdominales no se marcaran, se veía que ahí estaban bajo la piel. Posó su mano sobre mi pecho y empezó a recorrer todo mi torso con ellas. Yo utilicé mis dedos para ir deslizándome sobre su piel morena, que contrastaba con la mía que es trigueña. Me miró firme, me dirigió una sonrisa y me puso los brazos sobre sus hombros. Me dijo que me agarrara bien y entonces me tomó de los muslos y entrelazó mis pies en su espalda. Me sentí genial ahí sostenido por él. Me llevó hasta su cuarto y allí se sentó en la cama conmigo encima, besándome en los labios, por mi rostro y el cuello, pegando su torso con el mío, mi pecho chocando con el suyo. Después me acostó en la cama y me ayudó a quitarme el pantalón, quedando sólo en bóxers. Luego él hizo lo mismo. Se colocó encima de mi y empezó un camino de besos por todo mi cuello hasta mis tetillas, donde se detuvo un buen rato jugando con ellas con su lengua, mientras yo me retorcia del gusto. Siguió bajando repartiendo besos por mi abdomen hasta llegar a mis bóxers. Allí colocó su nariz muy cerca de mi pene y aspiró. Eso me excitó mucho. Después le dió un piquito en la punta sobre la tela, lo que me hizo gemir. Con sus dientes mordió el elástico y ayudado por sus manos en la parte trasera, comenzó a quitármelo lentamente, mirándome de forma muy ...
    ... sensual. Entonces me mordí el labio del morbo que me dio esa imagen. Él se subió y me besó de nuevo en los labios, luego en el pecho y después en abdomen donde sus caricias me hicieron cosquillas y no pude evitar reir. El me sonrió picarón y agarró mi pene y en la punta le dio un beso. Sacó su lengua y la posó sobre mi glande, en la abertura de la uretra que ya resumaba bastante líquido preseminal. Lo lamió todo, pasando su lengua por todo el glande y yo gemí con cada contacto. Me estaba torturando lentamente. Después se lo metió lo más que pudo (casi se lo traga entero porque mi pene no es muy grande, mide 16cm) y me hizo ver estrellas. Iba lento, sabía lo que hacía. Primera vez que alguien me hacía el sexo oral de esa forma tan metódica y deliciosa. Así que en un momento lo aparté para no venirme en su boca y lo tumbé en la cama. -Ahora es mi turno- le dije sonriendo. Le di casi el mismo tratamiento, sólo que yo me detuve más tiempo con sus tetillas y pectorales. Es que me gustaban porque estaban firmes y fuertes. Cuando llegué a su bóxer, lo miré a los ojos y puse cara de inocencia y ternura. Casi de inmediato lamí todo el pene sobre la tela y dio un tremendo suspiro indicando que le gustaba. Retiré el bóxers y me dispuse a darle la mejor sesión de sexo oral que hubiera tenido. Ya antes me habían dicho que era todo un as haciéndolo, y ahora pensaba regalarle un poco de mi talento a este jovencito hermoso y sexy que se había robado mi corazón. Empecé despacio, con la punta de mi ...