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El inquilino...
Fecha: 02/09/2018, Categorías: Gays Masturbación Autor: renovatio111, Fuente: xHamster
... dispuesto a golpear la enorme cabeza del clavo que su secuaz sujetaba sobre una de las manos del indefenso santo, era el más parecido al inquilino de doña Engracia. Toño se pasó toda la ceremonia recreándose en su imagen y en los recuerdos de la tarde anterior.No lo pudo evitar: al volver a casa, se encerró en el baño y se la cascó.También se la cascó esa misma noche antes de dormirse, la mañana del lunes antes de levantarse y la noche del lunes antes de conciliar el sueño.Por lo demás, el ungüento parecía efectivo y el dolor que sentía al defecar se suavizó de manera considerable.El martes por la tarde, hacia las siete, cuando volvía a la tienda después de entregar el último mandado, le salió al paso el hombre que ocupaba todos sus pensamientos.La piel entera se le erizó al verlo.-Hola, chavalín –le saludó el inquilino calibrando la respuesta del adolescente.-Hola –respondió Toño sonriendo.-¿Cómo estás?-Bien.-¿Bien del todo?-Bueno –carraspeó el chico dejando la cesta vacía en el suelo- Me duele un poco el culo.Al inquilino se le ensombreció el rostro.-¿Te arrepientes de lo que hicimos? –preguntó decepcionado.Toño meneó la cabeza en gesto negativo y añadió:-Sólo pienso en repetirlo.La cara del hombre cambió por completo, como si acabara de salir el sol en sus sentimientos. No pudo evitar darle una cariñosa palmada en una de las sonrosadas mejillas.A Toño se le puso tiesa de inmediato.-¿A qué hora terminas? –se interesó el inquilino.-Pronto. No hay ningún recado más. Así que ...
... lo que tardemos en ordenar el almacén.El hombre miró a izquierda y derecha para asegurarse de que nadie les escuchaba:-Sólo de verte ya se me ha puesto dura.Se metió la mano en uno de los bolsillos del pantalón al objeto de estirar la tela y que el chico viese el crecido bulto.-También a mí –e imitó el gesto del adulto.El inquilino se mordió los labios suspirando.-Anda y ve a tu trabajo. Te espero.-Vale.El muchacho entró en el almacén aledaño a la tienda de ultramarinos. Pascual, el joven encargado que trataba al chico de manera despótica, le puso una escoba en las manos nada más llegar.-Ya sabes lo que te toca.Toño le miró sin disimular su odio pero se puso a la faena.-¿Quién es ese con el que hablabas?El chaval volvió el rostro hacia Pascual con evidente alarma. Se encontró con la mirada ávida einquisitiva del joven.-A ti que te importa –respondió sin pensar.De inmediato Pascual captó los nervios del adolescente y supo que allí existía un secreto.-Cuidadito con la manera de dirigirte a mí, ratita presumida – le advirtió arreándole un coscorrón.Toño quiso devolverle el golpe con el mango de la escoba, pero Pascual se la quitó de las manos y le tomó del pelo con saña arreándole al tiempo un sonoro bofetón.El chico se lanzó contra él y se enzarzaron en una desigual pelea.En la disputa derribaron varios frascos de conservas que se estrellaron contra el suelo desparramando su contenido de atún escabechado.El dueño de la tienda acudió al escuchar el jaleo.Los separó con tan mala ...