1. UNA NUEVA VECINA 4


    Fecha: 15/11/2022, Categorías: Hetero Tus Relatos Autor: Caramelo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... papito?
    -Muchísimo. Si tuviera 20 años menos te la estaría metiendo de nuevo…
    -¿Me la pondrías en el culito, papi?
    -¿Te lo preparaste?
    -No, no. No sé qué es eso. 
    -Aaahh…, por eso. Te explico.- Mientras hablamos, Efi seguía chupando y lamiendo. - En primer lugar tenés que aprender a dilatar el esfínter. ¿Tenés consolador?
    -Si, pero es muy grande para mi cola. Me lo prestó Aldana, para la conchita, pero yo no quise usarlo hasta que me desvirgaras. Mi culo parece grande, por eso todos me lo miran…, pero el agujerito es chiquito… El consolador grande lo usaré en la concha…
    -¡Ya no te hace falta! ¡Te la abrí yo!
    -Si…, pero cuando pase un día y no me cojas…, me voy a masturbar con él, así me parece que sos vos…
    -¡Jajaja! ¡Peor es nada!
    -¡Jajaja! Todo está pensado. Cuando…, bueno…, vos sabés, me masturbo pensando en vos…, como me cogerías de lindo…, entonces me meteré el grande…, pensando que es tu pija.
    -Está bien, para el culo te voy a dar uno más chiquito, pero primero tenés que ponerte los enemas… 
    -¿Enemas? 
    -Claro, para dejarlo bien limpito. 
    -¿Lo qué se usa para los chicos cuando están estreñidos?
    -Justamente. - Le expliqué todo el proceso. – Cuando te sientas bien limpia te lubricás muy bien el hoyito con vaselina o alguna otra cosa parecida. Luego de untarte bien con el lubricante, untás el consolador y te lo vas metiendo poquito a poco. Si te duele o molesta parás. Si podés, dejátelo puesto, aunque sea un poquito, dejalo, para que el ano se vaya ...
    ... adaptando. Así varias veces. Una vez que lograste meterte todo el consolador, te sentás con el consolador puesto, y lo tenés todo el tiempo que puedas. Por lo menos mientras que no tengas que ir al baño. Luego que te metiste el chico hasta el fondo, intentá de ponerte el más grande. Lo hacés todos los días hasta la próxima semana. Cuándo vengás, traé el consolador puesto, cualquiera de los dos, el que prefieras. Vas a ver que cuando yo te la meta no te va a doler nada, y al final… ¡te va a gustar un montón…!
    -¡Qué lindo que me explicás todo! Dani… ¡sos maravilloso!
    El lunes siguiente fue muy emocionante. Efigenia había arreglado con Aldana, durante la mañana, en la escuela, que vendría por la tarde para que yo se la meta por el culo… Aldi iba participar luego, cuando ya la tenga bien adentro. 
    Cuando llegó, Efi fue directo al grano.
    -Mirá Dani, fijate que tengo en el culito. – Tenía una pollera larga, cosa que no se notara que no tenía tanga puesta. Se agachó y se la levantó, mostrándome el culo. Por supuesto tenía el consolador. ¡El más grande!
    -¡Bárbaro! ¡Vas a ver qué fácil va a ser! – Le acaricié suavemente el culo.
    La hice poner en cuatro, no sin antes desnudarnos totalmente. Se había lubricado muy bien. Le saqué el dildo despacito, girándolo hacia un lado y otro.
    -Así, papito. ¡Qué rico! Arde un poquito, pero me gusta.
    -Si te molesta, tesoro, lo dejo un ratito más.
    -No, no, dale, métemela. Estoy con unas ganas que me muero… - Efi estaba eufórica.
    	En ese momento entró ...
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