COMO EN CASA 2 - Relatos Eróticos

COMO EN CASA 2

... hago lo que hace Aldi cada vez que traés a Efigenia…
-¿Te lo contó? 
-Sí. Aldi le cuenta a Efi todo lo que hace con vos…, mmmmmmmmmmmmmm…, y lo que hacés con la hermana y con Clara y Laura…
-¡Jajaja! ¡Lo sabés todo!
-¡Por eso me gustás tanto! ¡Todas están contentas con vos!
-¡Pará, pará, tesoro! ¡No quiero acabar en el auto!
-¡Jajaja! ¡No querés ensuciarlo! No te preocupés… ¡me la trago toda!
-No. No es por eso. Quiero estar en condiciones de acabarte en la cama.
-¡Jajaja! Bueno, vamos.
Reanudé el viaje y entramos a su cochera. Ella había ido caminando a mi casa. El auto de ella estaba dentro, pero había lugar para los dos.
Salimos urgentes. Yo ni siquiera me había metido la pija dentro del pantalón. ¡La urgencia por coger era total!
Con una mano Alcira me agarró la pija. Con la otra me guió hacia el dormitorio. ¡Había olor a sexo! ¡Riquísimo olor a hembra!
-¡Jajaja! ¡Las chicas le estuvieron dando con todo! ¡Ni siquiera echaron desodorante o perfumes! – Alcira estaba eufórica y súper caliente. Me desnudaba mientras hablaba. - ¡Esto me inspira! ¡Qué calentura! 
-¡Jajaja! ¡¿Cuántas veces habrán acabado?! 
-¡Yo les voy a ganar! Aunque en verdad, cuando me masturbo, pienso en lo que le estarás haciendo a Efi. ¡Me da una envidia!
-¡Jaaja! Bueno…, ahora se irá el misterio y la envidia…
Yo la seguía teniendo durísima, esperando que terminara la faena que había iniciado en el auto. Se la metió en la boca, palpitante y húmeda gracias a sus chupadas “en viaje”. La ...

... sensación fue exquisita. Ya no tenía que prestar atención si salían las chicas… Sólo el placer de la boca de Alcira, una súper cogedora… ¡Se las sabía todas, al estilo Clarita! Me rodeó la pija con la lengua, desde el glande a los huevos. Se los metió en la boca, uno por uno y chupó el escroto. Tenía los huevos hinchados, apurados por que salga el esperma.
-¡Mamaíta! ¡Por favor! Si acabo ahora no podré hacerlo dentro tuyo antes de media hora, por lo menos.
-¡Pero tenés los huevos que explotan! No importa que tenga que esperar, podemos hacernos muchas cosas mientras tanto. ¡Dale, dale! ¡Acabame en la boca! ¡Quiero tragarla toda! ¡Efi me dijo que tu lechita es exquisita! 
Me había llevado la pija hasta la garganta. ¡Una experta en mamadas!
-¡Ajaj! ¡Mmmmmmmmmmm! ¡Aug! ¡Qué rica! – Alcira trataba de hablar sin sacársela de la boca. 
-Hagamos un 69. ¡Quiero chuparte! 
-¡Si dale! 
Me coloqué abajo. Ella no dejó de mamar un instante. Me refregaba culo y concha por la cara. Un movimiento genial. No soltaba la pija un segundo. Yo trataba de introducir mi lengua, tomar el clítoris con mis labios… Sus movimientos eran frenéticos. Al fin opté por meterle tres dedos en la concha para tenerla un poco quieta, y poder chupar a gusto.
-¡Nena! ¡VAAAA!!!! - Me sacudí, me estremecí, temblé todo junto a cada chorro y le inundé la garganta de semen…
Alcira gritaba, se atragantaba, gemía, suspiraba… Sus sacudidas indicaban su orgasmo. Me bañó boca y cara espectacularmente. Casi no podía ...