La inocencia de Ely 4: liberación - Relatos Eróticos

La inocencia de Ely 4: liberación

…Mi mente era un caos, nuevamente no sabía que pensar, el novio de mi hermana me había hecho suya por segunda vez y mi resistencia fue tan poca que incluso falté a clases por escaparme con él. Solo tenía dos cosas claras: aunque solo llevaba dos veces me iba a encantar coger, y la segunda, que tenía un fetiche, el de que me chupen los pies. Y las dos cosas juntas causaban una gran excitación en mi que lograban sacarme orgasmos intensos. Todo lo aprendí esa tarde de agosto después de ver como mi hermana era penetrada mientras sus pies eran devorados por su novio, yo quería estar en esa situación y minutos después se me cumplió, y de ser espectadora me volví protagonista y ahora fui yo a quien se cogieron mientras le comían los pies. 
Esos recuerdos y la posterior escapada al motel me hacían pensar demasiado, hasta que Aarón cometió el grave error de haberme grabado y enviarle el video a mi hermana pensando que la excitaría. Cual fue la sorpresa que mi hermana se sintió engañada, su enojo fue evidente y logre escuchar esa noche como mandaba a volar a Aarón, quien esperaba otra reacción, no precisamente esa. Yo en mi habitación podía imaginar que esa aventura había llegado a su fin. Por la mañana, mi hermana me interrogó sobre ese video.
- Que puedes decir del video hermanita?Te gustó cogerte a mi novio a escondidas mía?—
Yo quería llorar, apenas me enteraba del video con la conversación que escuché de ellos por la noche. 
— yo no quería Gaby, me dijo que me daría ride a ...

... la escuela y se fue de largo, no lo pude evitar—-
Gaby subió a su habitación y se encerró. Estaba muy preocupada y sabía que muy probablemente no volvería a ver a Aarón y mi hermana tardaría mucho tiempo en perdonarme. Pero no tenia mucho tiempo para preocuparme, tenía que ir a clases. Me terminé de preparar y me fui a clases con muchos pensamientos. Pasé el tiempo distraída, cuando me preguntaban algo de la clase no sabía responder. Necesitaba aclarar mi mente. Llego el receso y pasó algo que solo puedo definir como destino. 
— Todo bien?— Me preguntó una voz que apenas y recordaba. Se trataba de Ingrid, una compañera de clases con la cual realmente había hablado poco, apenas y sabía su nombre, nunca le había prestado atención en realidad, era mucho más alta que yo , castaña, ojos café claro, con lentes de pasta y brackets. No era muy agraciada pero tenia una figura impresionante, unos senos mas grandes que los míos y de trasero mismo caso. 
— Sí todo bien, por?— Me limité a responder.
—-Bueno, solo quería saber si pudieras ir a mi casa después de clases, para que me apoyes con la tarea de sociales.-
Ciertamente teníamos tarea y mi inteligencia es un don que tengo. 
—Tendría que avisar a mi casa pero claro— No vi nada raro, aunque la forma en que me miraba a los ojos me intrigaba. 
Salimos de clases e Ingrid se acercó a mi.
—Lista para acompañarme?—
—Eh, si, vamos— Y nos encaminamos a su casa.
Al llegar a su casa noté que no había nadie, solo nosotras dos. 
—Mis ...