TAREAS EN EL HÍPER 3
Fecha: 20/06/2023,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: CARAMELO, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... aunque sea, me puedes chupar los pezones… ¡son casi tan grandes como los de mamá!
Me pasa algo extraño. Nunca me ocurrió. Tengo grandes, inmensos desbarajustes éticos y morales. Esta piba me excita una barbaridad. Si su intención fue seducirme, lo consiguió, pero me parece muy mal aprovecharme de ella, aunque, en realidad, ella se aprovecha de mi debilidad ante el sexo, ante SU sexo, increíblemente deseable. No quería verla desnuda… ¡ahora me la quiero coger! ¡Una barbaridad! Pero… no puedo hacer otra cosa. ¡No puedo! ¡Estoy totalmente atrapado en el deseo! La siento sobre mí, siento la pija entre los aterciopelados cachetes del culo, y la siento durísima. Cada vez más dura y con más ganas. Y si ella se incorpora un poquito nomás, me quedaría totalmente parada justo apuntando a la concha. Ella se acomodaría y entraría, tal vez con alguna dificultad al principio, por lo estrecha que la debe tener, pero entraría, no sé si toda, pero bastante, y el orgasmo sería inevitable.
-¡Si papito! ¡Métemela! ¡Dale! ¡Quiero sentirte adentro! ¡Todo adentro!
-Pero… es muy grande para vos…
-¡Probamos! ¡Dale! Me voy sentando despacito, con tu pinga adentro, y si me duele paro, te lo juro. Paro, no me vas a lastimar. Si me duele paro. ¡Te lo prometo!
-¡Ay Jazmín! Eres irresistible, tengo miedo de no poder detenerme. ¡Me gustas demasiado! ¡Si te hago daño me muero! No podré volverte a ver jamás, ni a ti ni a tu mamá.
-No papito, no me harás daño. Te lo juro. – Me abraza, me acaricia, me ...
... besa. - ¡Te quiero tanto! ¡Eres tan dulce! ¡Todo lo que hicimos fue puro placer para mí! Deja que te la tome y me la meta, por favor…
Sin que yo dijera ni hiciera nada, se irguió con los piecitos apoyados en el sofá, me agarró la pija colocándosela en el lugar correcto.
-Verás. Ahora bajo un poquito.- Sentí como el glande se ubicaba en la apertura. Ella fue bajando despacito. - ¿Ves? Ya tengo la cabeza adentro. ¿La sentís?
-Claro que la siento. ¡Estás apretada!
-¿Te gusta apretadita? ¡A mí me encanta! – Fue bajando. Se tomó de mi cuello y descendió otro poquito. Calculé que casi un tercio de la pija estaba dentro. - ¿Te apreto mucho papito?
-No mi amor. ¡Me gusta! - Era la verdad. Creo que yo gozaba más que ella. El maravilloso conducto era puro terciopelo, y está tan húmedo que no había ninguna dificultad. - ¡Está perfecto! - Yo soy el desgraciado a quién le parece magnífico. ¡No le estoy haciendo ningún favor!
Siguió bajando. Me abrazó por el cuello y me besó en la boca.
-¡Es tan lindo sentirte! ¡Tan lindo! - Creo que ya le había metido más de la mitad.
-Mira, está casi toda. ¡YA! – Se la clavó de golpe. - ¡No me duele nada! ¡Si!
Comenzó a moverse como una profesional. ¿Vería porno? Hacia adelante, hacia atrás, giraba las caderas. La tomé de la cintura. Nuevamente se apoyó en mis hombros. ¡No había más que gozar! ¡Dale al mete y saca!
-¡Si papito! ¡Qué lindo! ¡Uy Dios! ¡Cómo me gusta! – Suspiraba, gemía. - ¡Aaahhh! ¡Aaahhh! ¡Aaahhh!
Un gritito en cada enterrada. ...