Esclavizado en un Campamento de Verano - 5
Fecha: 28/09/2018,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: Rikoooo, Fuente: SexoSinTabues
... –Sí, mucho –dije simplemente mientras olía aquella zapatilla Tiró la zapatilla a un lado y me puso la planta del calcetín en la cara. Estaba húmedo y caliente, algo sucio aunque al ser amarillo casi no se notaba, me empapó la cara con su sudor y empecé a lamérselo, él empezó a reírse, mitad de satisfacción mitad de cosquillas. Empezó a frotarse el paquete, que no tardó en hacerse notar, el pantalón blanco que llevaba marcaba todas las formas. –¡Vamos, quítame la otra! –me ordenó Le dejé el pie en el suelo y me puse a desatarle lentamente los cordones, de vez en cuando miraba para arriba, la visión era excelente, estaba frotándose el paquete y mirándome a través de su melena rubia con esos preciosos ojos azules. Ya no se molestaba en apartársela de la cara. Metí un dedo en la zapatilla, estaba igual de húmeda y caliente que la otra, con la otra mano levanté el pie y tiré sacándosela lentamente y mostrando el calcetín amarillo en todo su esplendor. Se lo lamí provocándole esa risita otra vez, yo estaba a mil, mi polla estaba encantada con aquel festín que me estaba dando. –Que suerte tiene Roberto, eres un perro de primera –dijo con tono amable Yo no hablé ya que estaba muy entretenido, sentado sobre mis talones le había levantado los pies y le lamía ambos dedos gordos a la vez, el paquete de Mario no hacía más que crecer y crecer. De repente se la sacó, nunca había visto una cosa igua, le medía 19 cms y era algo más gruesa que la de Roberto, empezó a pajearse mientras me ...
... miraba lamer. –Me han dicho que la chupas bien, ¿es cierto eso? No lo dudé, me abalancé sobre ella, la descapullé y empecé a darle lametones, él se inclinó hacia atrás y apoyó la cabeza contra la pared. –Mmmmm era verdad –dijo dejándose hacer con una expresión de completa felicidad Yo lamí casi con ansiedad, era de largo, y nunca mejor dicho, la polla más grande que había tenido en la boca y no quería desperdiciarla. Él empezó a gemir, disfrutaba con cada lametazo que le daba. Aumenté el ritmo y empecé a mamársela con más velocidad. –Ufffff tíooooo –dijo a cerrando los puños con las sabanas dentro Su polla babeaba casi como la mía, empecé a masajearle los huevos mientras chupaba más y más deprisa. –Paraaa paraaa tioo que me corrooo, paraaaa Pero no solo no paré sino que aumenté un poco más el ritmo, con el efecto deseado. –Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaah Empezó a correrse de forma brutal chorros y chorros de leche salían, casi no daba abasto, tragaba tan rápido como podía, a veces se me escapaba por la comisura de los labios, lamiendo y tragando cada gota blanca que salía de ese excepcional pollón. –Mmmmmm que ricooo llevaba días sin pajearme –dijo abriendo los ojos y mirándome con cara de cansancio Se metió la polla en el pantalón y se quedó mirándome, yo seguía sentado sobre mis talones. –Tengo que venir de visita más a menudo –dijo con una sonrisa– Ponme las zapatillas, que me marcho No sin pena comencé a ponérselas, era menos divertido que quitarlas. Cuando terminé de atarle los ...