TAREAS EDUCATIVAS 3 - Relatos Eróticos

TAREAS EDUCATIVAS 3

... espiando! ¡Desvergonzada! ¡Jajaja! – A Danna le encantó que la nena nos viera. ¡Es el preludio de un trío!

-Bueno chicas, me voy a trabajar. - Me bañé, me vestí, saludé a ambas con respectivos besos en la boca, retribuidos por caricias en el bulto, y me fui. 
Esperaba qué de una buena vez, la mamá le dé los datos precisos para que le pueda dar por el culo. Cuando al mediodía me encontré con Danna en su caja, me dijo sonriente que “todo estaba bien”. Veríamos a la tarde. Se me hizo bastante larga la espera. Llevando a Danna a su casa me fue explicando. 
-Si Dani, todo bien. Le di todos los datos a Jami, le dije como tenía que hacer, le di varios plugs de distintas medidas. Directamente, a la mañana le puse el más chiquito, y le enseñé a cambiarlos, y a hacerse los enemas. Claro, todo eso lo tiene que hacer cuando esté en casa, antes de estar con vos. ¿Lo vas a hacer ahora?
-Sí. Sí ella quiere hacerlo, si tiene ganas…
-¡Está ansiosa para que sentirte dentro de potito! Pero quiero estar yo, para que se la metas de la mejor manera posible, para que no le duela.
-Tú sabes que no le voy hacer doler. Yo prefiero que estemos solos los dos, por lo menos la primera vez. - Esto veníamos hablando tranquilamente en la camioneta. ¡Hablando de abrirle el culo a la hija como la cosa más natural del mundo!
-Tienes razón, lo mejor es que estén solos. Luego lo podríamos hacer los tres… ¿te gustaría? – Danna está en el camino de la lujuria… ¡Eso es bueno!
-¡Claro! ¡Muchísimo! – ...

... Riendo le acaricié la raja sobre el vaquero. Ella me correspondió acariciándome el bulto.
Cuando llegamos Jazmín estaba esperando. Apurada como siempre, cuando espera una cogida. Supongo que estaría con el plug en el culo.
Luego del ingreso a la casa, nos llenamos de besos y caricias. Mientras yo le acariciaba los glúteos, ella acariciaba el bulto. Ambos esperábamos lo mejor, entre risas y carisias…
-Voy al baño, papito. Me prepararé como me dijo mamá. – Danna, sonriente, le acarició cariñosamente la cabeza.
-Si mi amor. ¡Muy bien! – Le dio un besito en los cabellos.
	Lanzándome un beso con las manos, Jazmín fue rápidamente al baño. Nos besamos con la mamá y nos sentamos en el sillón.
-Trátala con cariño, por favor.
-Sabes que no será de otra manera. – Nos abrazamos y toqueteamos. Danna estaba tan caliente como Jazmín. 
-El resto de la noche quiero que estés para mí.
-Totalmente, mi amor.

	Luego de algunas chupaditas mutuas, caricias y besos, quince o veinte minutos más tarde, salió la nena del baño. ¡Se tomó su tiempo para higienizarse las tripas! Se colocó un bonito baby doll rosa transparente con florcitas amarillas. ¡Es el que compró cuando la llevé a la boutique! Nunca se lo había visto puesto. ¡Lo había reservado para un momento especial! No dijo nada. Se dirigió directamente al dormitorio de la madre. Besé a Danna y me dirigí al baño. ¡Me tocaba a mí! En cinco minutos me duché, los más prolijamente posible. Me puse la salida de Danna y salí. Como fue ...