TAREAS EDUCATIVAS 3
Fecha: 03/07/2023,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: CARAMELO, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
No sé si las chicas se durmieron rápidamente. Yo, por lo menos, no estuve más de 10 segundos despierto. Era lo previsto. Me despertaron “inopinadamente”, chupándome la pija. Pero solamente la nena. Cuando notó que estaba despierto vino hacia mi cabeza.
-Papito…, ¿me llenas la chucha? Mamita todavía no me dijo que tengo que hacer con el culito, para que me la puedas meter. ¡Acábame en la chucha, por favor! Por lo menos a mami le gano en eso… ¡jajaja!
-¿Cómo?
-Y si…, mamá te pidió que no le llenaras la chucha, porque tiene miedo de quedar embarazada. Y por eso le llenaste el ombligo. ¿No quería lechita en la boca?
-No me había dicho que la quería en la boca.
-¿No quiere saborearla? ¿No le gusta?
-Espera, espera. Vamos a la sala. Acá podemos despertarla. – Nos levantamos y, desnudos y abrazados, vamos al sillón de la sala. Yo la tenía duramente al palo, gracias a la pre mamada de Jazmín. Cuando nos sentamos, la nena se agachó para mantenerla al palo.
-No me había dicho nada. Tu mamá no me había dicho que quería que le acabe en la boca. No me gusta hacer algo que no me piden. No me gusta obligar a nadie a nada. Hay chicas a quienes no les gusta que le llenen la boca de semen.
-¿Por qué? ¡Es tan rica!
-Y bueee… Qué se yo.
-A mí me puedes llenar la chucha todo lo que quieras. No tengo problemas…, no tengo el período. También en la boca. Espero que en el culito también me dejes lechita.
-¿Y cuándo tengas la menstruación?
-Lo hacemos por el poto o en la boca. No en ...
... el ombligo.
-Pero yo no sabía que ella lo quería en la boca. No quería hacer algo que no quisiera.
-Yo estoy segura que a mamita le gusta mucho, muchísimo, que le llenes la boca de semen y la chucha también y en el poto también. Le gustas en todos los agujeros.
-Siéntate arriba del respaldo con las piernas bien arriba. - Así se puso y así la penetré. Eso me permitía chupar los extraordinarios pezones de Jazmín, algo que a ella le encanta.
Jazmín se abrazó a mi cuello, con sus labios en mí boca, y me rodeó la cintura con sus piernitas. La presión no impedía el bombeo, que ella acompañaba con sus caderas. La abracé acariciando su espalda… ¡Es un verdadero acto de amor! Cuando separábamos las bocas para respirar, yo agachaba la cabeza para ir a sus pezones. Pocos minutos pasaron antes de que Jazmín derramara su exquisito elixir. Sobre mis muslos chorreaba la tibieza de sus fluidos. Yo intentaba aguantar para no acabar demasiado pronto. Quería sentir algún orgasmo más de la nena antes de llenarle la conchita. En no más de 15 minutos, Jazmín volvió a dos orgasmos más. ¡Al fin! Espasmos más espasmos, delataron los chorros de semen que se anidaban en la conchita de Jazmín. Ella apretó sus piernas, sus brazos…, y acompañó con su estremecimiento mi eyaculación.
-Amorcito, quédate quietita… ¡te la voy a chupar! – Cuando la sentí fláccida, la saqué y me agaché, yendo con mi boca al corazón, al verdadero corazón, de la nena. ¡Todos sus sentimientos estaban en su conchita! La ...