El cumpleaños de la tía Eli
Fecha: 05/10/2018,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: Lman13, Fuente: CuentoRelatos
... cuando andaba en su etapa oscura. Ana y Jess contaban y Carlos la defendía. El tipo era agradable en realidad.
Tomamos varias copas y estábamos muy contentos cuando dos tipos acompañados de dos mujeres se acercaron a la mesa.
- Hola Carlos. Hola señoritas.
El humor se apagó de inmediato. Carlos contestó el saludo fríamente y las chicas ni contestaron.
- Si se les antoja un juego de pool, por aquí vamos a andar…
Se rieron y se fueron a una de las mesas de pool. Cuando se alejaban, uno de ellos hizo con las manos como si tomara una foto.
- ¡Par de imbéciles!
Carlos iba a levantarse de la mesa, pero Jess lo detuvo.
- No Carlitos. Déjalos. Mejor pídeme otra copa.
Carlos pidió otra ronda y la tomamos casi en silencio. Yo, mientras tanto, veía jugar a los tipos. Eran un par de patanes de esos que abundan. Con buenas ropas, pero mal gusto. Trataban a las chicas que los acompañaban de manera corriente, hablándoles con groserías a la vista de todos. Eran escandalosos y mal hablados. Las mujeres eran descaradamente corrientes, guapetonas, pero sin ningún trazo de elegancia.
Carlos pidió otra ronda y dijo:
- Qué les parece si después de estas nos vamos a otro sitio. Yo los invito.
- ¿Qué pasa? – pregunté.
- Hace como año y medio vinimos aquí como de costumbre. – empezó a contar Eli. – Ana y yo veníamos con unos amigos y tomamos bastante. Ese par de idiotas se pusieron a jugar con ellos y les ganaron todo el dinero. Hicieron una apuesta. Un juego ...
... más, si perdían devolvían el dinero y si ganaban Jess tenía que mostrar sus senos y dejarse tomar una foto. Ellos ganaron y se tomó la foto.
- ¿Y por qué no simplemente se marcharon cuando se les acabó el dinero?
- Estábamos muy tomados todos. Creímos que era una bobería, como una travesura… pero estos tipos empezaron a enseñar la foto por todos lados. No se ve la cara de Jess, sólo sus senos y sus manos levantando la playera. Ni siquiera se ve todo y está mal tomada, pero no pierden la oportunidad para burlarse.
- Carlos, ¿juegas billar?
- Sí, pero no soy muy bueno.
- Ellos tampoco. Dame todo tu dinero.
Carlos se me quedó viendo con extrañeza igual que todos los demás.
- Anda dámelo.
Me lo dio y lo puse con el mío, luego le dije:
- Sígueme y haz lo que yo.
Nos acercamos a la mesa y les dije a los patanes:
- ¿Les interesa un juego?
- Se me quedaron viendo y sonrieron.
- ¿Traes dinero?
Puse el dinero sobre la mesa.
- Veinticinco mil.
- No traemos tanto.
- ¿Cuánto traen?
Contaron su dinero y dijeron:
- Tres mil
- ¡Ja! Ni la molestia de haber caminado hasta acá… Ok. Carlos y yo les apostamos este dinero contra la ropa de ustedes y sus amiguitas. ¿Qué les parece?
Se quedaron viendo entre ellos dudando.
- Dos de tres juegos,bola ocho,pero les advierto, soy muy bueno y no tienen nada que hacer contra mí. Mi consejo es: tomen su dinero y a sus mujeres y váyanse de aquí.
La gente empezaba a reunirse alrededor de ...