Abuela beatriz
Fecha: 15/08/2023,
Categorías:
Infidelidad
Tus Relatos
Autor: pocker123, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... leche!!
__¿Te ha gustado?
__¡Como no, eres increíble!!__ se acurrucaron en la cama. Pegaron sus cuerpos y Bea busco los labios del joven. La lengua de la mujer se metió muy hondo. Los besos eran ardientes. Ella no dejaba de acariciar la poronga del nieto y el nieto por vez primera acarició la raja de Bea. Los gemidos empezaron a surcar el ambiente.
La humedad de la caliente cueva empezó a hacer que los dedos de Juan se hundieran en aquella caja líquida. Dos dedos y el aliento de Bea se volvió un fuego caliente y salvaje. Ardían de deseo. Pellizcaba el clítoris, aquel botón y la mujer aullaba y se derretía sin dejar de chupar la lengua del chico.
A veces el chico se aferraba a las tetas hermosas. Los pezones duros y levantados, magnánimos, soberbios. Las sobaba y las apretaba. Los jugos de la mujer se hacían más y más abundantes.
La boca del chico se prendió a las maravillosos senos de Bea. Con los dientes mordisqueaba los pezones. Chupaba como bebé. La lengua se apoderaba de aquel reino montañoso, sin dejar de hundir los dedos en el cofre mojado, precioso.
__¡Oh bebe chupa, come mis tetas!!¡Así, ahhh, me encanta!!!__ gimoteaba la abuela, mientras el chico mordía las tetas y cogía con los dedos la vagina caliente, la mujer tenía un orgasmo y luego se corría otra vez, danzarina de fuego, en tanto con sus manos no dejaba de acariciar la vara alzada del nieto.
__¡Quiero que la metas dentro mío!!__ decía la abuela Bea en tanto Juan, su nieto, se montaba ...
... sobre ella. Bea abría las piernas y el garrote duro del chico se abría paso en aquella cueva caliente y húmeda llena de jugos.
__¡Ohhh estas tan húmeda!!!
__¡Tu me pones así!!__la mujer era un charco vivo. Sus jugos se mezclaban con el perfume a sexo que abrumaba en aquella habitación salvaje. Los dos eran un remolino de abrazos y quejidos de placer. Juan empujaba y metía la vara. La sacaba un poco luego y la volvía a hundir dentro de la concha. Sus caderas se movían rítmicamente. Bea atajaba esos empujones y se abría un poco mas, se baría como flor, gozando como perra. Su boca tragaba la lengua del nieto, sacaba y muy caliente. Al borde de otro orgasmo Bea se retorcía emputecida. Bramaba y sus pechos se movían, saltando y en cuanto podía Juan les daba un mordisco feroz, ella aullaba de placer y de dolor. Gimoteando como niña, se dejaba arrastrar por ese hormigueo que le nacía desee tan adentro y no podía evitarlo y casi lloraba temblando y dejándose llevar por otro eléctrico orgasmo.
__¡Oh querido, que bien, ahhh, sigue, sigue enterrando tu banana, sigue cogiendo a tu abuelita, ahhh, ohhhh, estoy gozando tanto!!!__ clamaba la abuela en el oído ardiente del chico, que apuraba las estocadas, su poronga se inflamaba un poco más y empezaba a largar su líquido espumoso, pegajoso, en escupitajos breves, gordos, el muchacho se vaciaba y agitado se iba calmando sobre los pechos abundantes de la abuela alzada.
__¡Ahhh Juancito me has hecho gozar!!!
__¡Tu también Bea, eres ...