Deseo Tardío
Fecha: 05/10/2018,
Categorías:
Transexuales
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... que mostró le gustó. Entonces él me apretó contra su cuerpo más fuerte aun y apoyando claramente su pene en uno de mis muslos comenzamos a bailar, muy, pero muy pegados. ¡Que delicia! Sentirme así, apretado por un hombre, sintiendo su sexo endureciendo contra mi cuerpo (me preocupaba que con el mío pasaba lo mismo). Al principio me sentía dura, como cortada, pero él supo llevarme, mover mi cuerpo al ritmo de la música, se sentía hermoso. Sus manos comenzaron a moverse, acariciando mi espalda primero, pero llegando pronto a mi cola. Ahhhh, si, que placer, me provocaba unas cosquillas preciosas y juro que sentí mi anito abrirse y cerrarse ante ese estimulo.-
.- Mónica, me gusta tu culo –me dijo
.- Oh gracias mi amor.-
Mientras yo llevé mi mano, ya decidida, a su entrepierna, y comencé con caricias, por encima de su slip. Eso le gustó:
.- Ahhh, nena, vamos a la cama me dijo.- y tomandome de la mano, me llevó haciendo que me acostara en ella. El se acostó a mi lado y yo rápidamente recomencé con mis caricias por un instante, para luego tomar su slip y comenzar a bajárselo. Miré hacia abajo, su pene esta bien erecto y bien duro, y lo tenía ahí, para mi, no podía creer lo que estaba sucediendo ¡lo había deseado hacía tanto tiempo!
Lo rodee con mi mano, estaba tibio y suavecito y con la mayor de las delicadezas comencé a masajearlo. Me di cuenta que le estaba dando placer por la expresión de su rostro y la forma en que recibía mi caricia con los ojos cerrados y ...
... porque el además comenzó a acariciar mi cuerpo mientras tanto. Lo bueno fue que él tenía harto paciencia, teniendo en cuenta que era mi primera vez, eso era lo que más necesitaba. El me dejó obrar hasta que instintivamente surgió en mi el deseo de avanzar, y ese avanzar era ahora, agacharme y chuparle sumisamente la pija. Acerqué mi boca a la punta de su miembro, sintiendo que todo mi cuerpo temblaba de emoción. Le di el más dulce de los besitos en la punta y enseguida empecé a lamérsela. Sentía en mi lengua su textura, su sabor salado, me gustaba, sobre todo cuando sentí que le arrancaba un claro suspiro de placer. Entregada ya a mi labor, extendía mis lamidas a todo su tronco, para luego tomárselo con la mano y sin dejar de estimularlo moviendola a su alrededor, bajé aun más para lamer sus bolas, en un signo de total y completa sumisión. Recibí el estímulo de mi hombre que me pidio que siguiera mientras acariciaba mi cabeza allá, abajo, entres sus piernas. Pero en mi se hizo más grande el deseo de sentir su pene en la boca y decidí iniciar, por primera vez la mamada del miembro de un hombre
Abrí levemente mis labios y los posé, nuevamente en la punta del pene. Coloqué la punta de mi lengua en el ojito que cubrí con mi boca, y desde allí me fus deslizando hasta abajo abriendo mi mandíbula, hasta alojar en mi boca su deliciosa frutilla. La sorbí, la chupé!!!!, siii al fin, chupé la cabeza la pija con fruición, era maravilloso me encantaba, al fin era una verdadera petera. ...