Roxana enloquecida por un gran bulto
Fecha: 06/10/2018,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: claudiob, Fuente: CuentoRelatos
... barbilla, en el momento en que sentí que Rubén echaba su semen en mi concha, tuve un orgasmo tan fuerte que lo acompañé con una chorro largo y caliente de orina. Rubén al verlo, le dijo a Daniel, mirá como acabó esta puta, y yo, lejos de enojarme, le dije: “Y esto recién empieza”, a lo que Rubén me respondió, mientras hurgaba con algo duro y caliente en mi culo, “Así es, vas a ver lo que te hace este jovato” y sin más me ensartó, eso con lo que estaba hurgando, en mi culo. Me doy vuelta y veo que es su pija, la que está entrando y saliendo, como pancho por su casa, de mi agujero posterior.
Le pregunté: ¿Cómo es posible que ya me la estés ensartando, si hace escasos momentos acabaste en mi cajeta’”, y él me dice: “Viste el poder de la pastillita azul. Cuando salí de casa tomé una y ya vez” y continuó entrando y saliendo cada vez más rápido.
Di vuelta la cabeza y vi que por más que lo intentaba la pija de Daniel seguía como cuando se bajó el calzoncillo. Por lo cual aumenté la velocidad con que la recorría con las manos.
A los pocos momentos sentí como me llegó un nuevo orgasmo, provocado por la verga de Rubén que no dejaba de taladrar mi ojete.
Al sentir mis gritos Daniel me agarró la cabeza e hizo que mi cara se enterrase entre sus huevos, al tiempo que Rubén se agarró más fuerte de mi cintura y comenzó a entrar y salir a la máxima velocidad; llegué nuevamente al sentir como golpeaba su leche en mis entrañas y él se derrumbaba sobre mi espalda, al tiempo que ...
... exhalaba un grito estridente.
Quise volver a besar la poronga de Daniel, pero sus manos no dejaban de apretarme la cabeza hundiéndomela en sus testículos. Me estaba ahogando cuando sentí que algo húmedo y caliente corrió por mis manos, me di cuenta que era semen y no orina, y cuando soltó mi cabeza y sus ojos se cruzaron con los míos me dijo ¡Gracias!
No supe que responderle y él, viendo la cara de perplejidad con la que lo miré, me dijo: “Gracias por hacerme llegar. Hace muchos años que no lo disfrutaba tanto” y continuó diciéndome: “Tengo un problema en mi pene, de allí que su tamaño sea tan grande, cuando Rubén me dijo que vendrías me emocioné y esta mañana cuando me levanté me tomé dos pastillas azules, pero no sirvieron, mi pene no se despertó a pesar de ellas, de tus besos y caricias”.
Rubén sacó en ese momento de mi culo su pija y sentándose al lado de Daniel, me sonrió viendo como mi pelo estaba lleno de la leche de su socio. Entonces yo le pregunté a Daniel: “¿Cómo llegaste si no se te paró?” Y él me contestó: “Me calenté tanto que eyaculé. ¡No pude contenerme!” y Rubén agregó: “¿Entendes por qué te dije que no te iba a entrar? Tiene una verga hermosa, y como no lo puede negar tu cabeza, en sus huevos hay muuuucha leche, pero no se le para. Mirá él tomó dos pastillas azules y la sigue teniendo dormida, yo tomé una, te acabe dos veces y si queres lo hacemos otra vez”
Yo solté la pija de Daniel y me pasé las manos por la cara chupándome los dedos para sentir el ...