Vení, cogeme mientras escribo
Fecha: 26/12/2023,
Categorías:
Anal
Autor: Martina Paz, Fuente: CuentoRelatos
... por venir.
Cuando siento que tu lengua caló tanto que podría comenzar a descender por mi garganta, separo nuestras bocas, te miro a los ojos y agarro tu pija con una mano, sin dejar de escribir. La acaricio con suavidad, pero con ganas. Te pajeo un poco, disfrutando de esa cosa que crece más a cada segundo, y de tu mirada perdida y cargada de satisfacción. Está muy dura, por lo que decido acomodarla entre mis tetas, indicándote que las aprietes y obligándote a que me las cojas. No es la posición más cómoda para escribir, pero no puedo dejar de hacerlo, como tampoco quiero dejar de darte placer. Tras cada subida recibo un golpecito en la pera que me llena de placer. De a poco siento como la humedad comienza a apoderarse de mi concha. Te deseo, deseo que entres en mí, tan fuerte y profundo, hasta hacerme olvidar de mi propio nombre.
La transición de tu pija desde mis tetas hacia mi boca se da tan gradualmente que, cuando me doy cuenta, tu pija está entrando y saliendo de mi boca con violencia, llenándola completamente e impidiendo que mi respiración sea normal. Con una mano me sostenes del pelo, mientras con la otra me pegas en la cara. Me decís que soy tu puta, que me encanta chuparte la pija, que me la voy a tomar toda. Yo escribo todo lo que decís, mientras en mi mente cada imagen se va haciendo real. En mi mente y, sobre todo, en mi cuerpo. De repente me ahogo y comienzo a sentir arcadas. Eso, en lugar de hacer que bajes tu intensidad, te vuelve loco. Tu pija entra ...
... cada vez más profunda dentro de mi boca, haciendo que mis ojos se llenen de lágrimas. Me liberas por un instante de tu pija, te acercas a mi cara y me chupas los ojos. Eso sí que se siente extraño, pero extremadamente placentero.
Al parecer, ahora estás en eso de chupar. Corres un poco mi silla, te arrodillas entre mis piernas y me chupas la concha, totalmente empapada, mientras yo sigo escribiendo. A medida que pasan los minutos, mi cuerpo se tensa cada vez más. No es cómodo escribir mientras una aspiradora humana te succiona la concha como si de eso dependiera la no extinción de la humanidad. Y lo disfruto, pero me cuesta mantener la vista en la pantalla. Te ves tan lindo ahí abajo, se siente increíblemente bien. El sonido de tu boca al saborear mi primer orgasmo, es algo que me destruye la mente. Me destruye, pero a la vez me relaja y me enciende aún más, sin importarme la contradicción en esto. Con una mano te tomo del pelo y te hago poner de pie. Sabes lo que quiero. Sin soltarme la mano, me tiras hacia vos y me paro a tu lado. Nos besamos. Me encanta sentir en tu boca el sabor de mi concha.
Dejando de escribir durante algunos segundos, con ambas manos te agarro la pija. Siento tremendas ganas de volver a chupártela, pero el deseo de sentirte adentro de mi concha me puede más. Te pajeo por unos instantes, para luego invitarte a sentarte en mi silla. Me siento sobre vos, volviendo a escribir. Froto mi culo y mi concha sobre tu pija durísima, queriendo que este momento ...