Así me cogieron mientras mi esposo trabaja
Fecha: 30/12/2023,
Categorías:
Infidelidad
Autor: soyAriel, Fuente: CuentoRelatos
... entró la punta de su lengua en mi interior, suspiré y mordí mis labios al tiempo que apretaba las sábanas, la movía en forma circular, avanzando cada vez un poco más, metiendo y sacando su lengua y combinando con chupetones en mi culo, después de un largo rato dijo:
- Me encanta comerte el culo, ufff, es tan rico que me lo comería una y otra vez, ¿Sabes? mi ex no me permitía que le comiera el culo.
Entendí entonces que lo que tenía de guapo, lo tenía de pervertido, lo contrario a la puritana de Cecilia, pero lo último que quería era saber de su ex y le rogué:
- Anda papi, cógeme, quiero ser tu hembra, tu mujer, ya no aguanto.
Sonriendo se desnudó por completo y se acostó al lado mío, me dio un jugoso beso que respondí con pasión, sentí un sabor extraño, pero no me desagradó, era el sabor de mi culo.
Me miró y con una sonrisa maliciosa me susurró al oído:
- Desde que te vi, sabía que eras una mujer ardiente, desinhibida y deseosa de gozar sin prejuicios, dichoso tu marido, princesa, si todas las mujeres fueran como tú, eres la dicha de este mundo.
Me encantó el cumplido y me entregué por completo, acaricié su fuerte espalda, mientras su lengua recorrió la parte detrás de mis orejas, nuevamente buscó mi boca y su lengua traviesa me llegó muy profundo, se movía alrededor explorando el interior de mi boca y entraba y salía hasta el techo de mi paladar, prácticamente me estaba cogiendo con la boca de una forma increíblemente excitante.
Entonces sentí su ...
... verga en la entrada de mi coño, abrí mis piernas invitándolo entrar, mi coño chorreaba y casi lloro de emoción al sentir la cabeza de su verga abriendo mis pliegues vaginales, la sentía palpitar, dura, poco a poco fue empujando y ese trozo de carne caliente y gordo se fue introduciendo en mi interior, disfruté cada centímetro, indudablemente estaba muy bien dotado, llegó un momento que sentí que estaba completamente llena y me estiraba por dentro, por fin sentí su pelvis rebotar contra mi coño, me sentía tan plena, tan llena, me confirma:
- Princesa, la tienes toda dentro, gózala.
- Si amor, la siento, que dura y gruesa, me encanta, mátame amor, dame duro, gózame, aghhh.
Empezaron las embestidas, primero lentas y profundas, fue aumentando la intensidad, abracé su cuello y busqué su boca al tiempo que aumentaba la velocidad de sus embestidas, me empaló en una forma encarnizada por unos 20 minutos, tanto que sentía un poco de ardor en el interior de mi coño, pero no me importaba, el placer era mucho mayor, estaba segura que pronto se correría en mi interior, pero ese macho tenía otros planes:
- Aghhh, tu coñito es riquísimo, cómo aprieta, pero quiero probar también tu culito, me encanta, quiero llenarte de verga todos tus agujeros.
- Si, papi, lo que quieras, lléname de verga todos mis hoyitos, soy tuya, tu puta.
Sacó su verga y me pidió lubricante, me agradó que lo hiciera, ya que si bien previamente había disfrutado y dilatado mi esfínter, por el grosor de su ...