Así me cogieron mientras mi esposo trabaja
Fecha: 30/12/2023,
Categorías:
Infidelidad
Autor: soyAriel, Fuente: CuentoRelatos
... verga y su forma tan impetuosa de coger, seguramente me habría lastimado
Me levanté y busqué mi lubricante personal, el cuál mi marido usaba cuando quería que le diera el culo.
Me tomó de la cintura y me dio vuelta, colocó unos almohadones bajo mi vientre y abrió mis piernas al máximo, quedando en esa conocida posición de entrega total, lista para el sacrificio, por el espejo vi que tomó una cantidad generosa de lubricante y lo aplicó en la entrada de mi esfínter, masajeando suavemente mis arrugados pliegues al tiempo que decía:
- Tienes un culo hermoso, princesa, va a ser un placer enorme darte por el culo, ¿Quieres mi verga dentro?
Iba a responder afirmativamente cuando empujó su dedo medio completamente lubricado y mi respuesta de transformó en un largo
- Siiii, aghhh, que rico papi, sigueee.
Siguió metiendo y sacando su dedo, dilatando mi anito, hasta que pronto fueron dos dedos en mi interior, los giraba en forma circular y los abría un poco ayudando a ensanchar mi conducto anal.
Cuando consideró que estaba lista, se recostó y con su verga recorrió una y otra vez la raja bien lubricada entre mis nalgas, en cada recorrido se quedaba un segundo en mi ojete y continuaba el recorrido, se sentía delicioso, parecía que me la iba a meter, pero nada, hasta que que me hizo rogarle:
- Papi, estoy que ardor, ya métemela, no me hagas sufrir.
- La quieres dentro, princesa.
- Si, papi, quiero ser tu hembra, tu puuu… aghhh
No alcancé a terminar la ...
... frase, apoyó la punta de su verga en mi esfínter y empujó con más fuerza, mi esfínter se abrió y me enterró toda la cabeza, se quedó un momento quieto y me preguntó:
- ¿Te duele?
A pesar de su diámetro no había sentido el más mínimo dolor, al contrario puro placer, pero le dije que me había dolido un poco.
- Puedo seguir?
- Si papi, despacio- respondí.
Me la fue enterrando muy lentamente, centímetro a centímetro me fue abriendo el hoyito, sentía como esa barra de carne avanzaba y avanzaba y empecé a dar bocanadas de aire para relajar lo más posible mi cuerpo, hasta que por fin sentí sus huevos chocar con mis nalgas.
- Ya la tienes toda dentro princesa, que rico, tienes el mejor culo que me he comido en mi vida, uuuf, es tan apretadito, suave y caliente.
Después de un par de minutos sin moverse, dando oportunidad a que mi culo se adaptara al calibre de su verga, me dio una nalgada y empezaron las embestidas, me encantaba como su verga me recorría por dentro, cómo estiraba mis pliegues al máximo, llenándome por completo, entre gemidos y jadeos fue aumentando poco a poco la intensidad, mis nalgas chocaban contra su pelvis, me estaba taladrando divinamente, todo mi cuerpo se zangoloteaba, cuando de pronto se escapa su verga de mi culo y por la excitación del momento, apunta a mi hoyito y da un fuerte golpe de cintura ensartándome su verga hasta el fondo, ese embestida me tomó desprevenida y no pude evitar dar un agudo grito de dolor por la salvaje empalada, unos ...